El caso del nieto encontrado 102 puede ser utilizado por Arroyo Salgado para la causa de los jóvenes Noble

La jueza ya está en condiciones de decidir sobre las muestras

Por G. A.

Como sucedió con los hijos adoptivos de la dueña de Clarín, hubo irregularidades en la toma de pruebas, pero igual se llegó a la verdad.

Luego de una corta licencia por problemas de salud, la jueza federal Sandra Arroyo Salgado retornó al juzgado de San Isidro, donde se espera que esta semana tome alguna decisión sobre las muestras de ADN de Felipe y Marcela Noble Herrera en la causa en la que se investiga sin son hijos de desaparecidos.

“Lo único que queda por discutir es cómo se obtiene el ADN, si con las muestras que brindaron en diciembre de 2009, si se obtienen nuevas muestras con allanamientos o de manera compulsiva”, resumió ayer el abogado Alan Iud, representante de la querella de Abuelas de Plaza de Mayo.

A principios de este mes, la organización de Derechos Humanos respaldó el pedido de la fiscal Rita Molina para que se utilicen las muestras de sangre y saliva que los jóvenes entregaron de manera voluntaria cuando el juez todavía era Conrado Bergesio. Abuelas pidió que, si se verifica que la muestra no fue cambiada ni adulterada, se proceda a su comparación con el Banco Nacional de Datos Genéticos, teniendo en cuenta los antecedentes de la causa: “Dos allanamientos de dudosa eficacia, que podrían haber sido fraguados, y un episodio extraño de un juego de esas muestras que el juez Bergesio retuvo en su juzgado por dos semanas en una caja fuerte que apareció con la llave rota”, enumeró Iud.

Además, los abogados de Abuelas reclamaron en su pedido que se averigüe cómo se había procedido en una causa similar que estaba llevando el juez Rodolfo Canicoba Corral. Justamente, en el caso del joven Rochistein-Tauro, que ayer el organismo de Derechos Humanos dio a conocer luego de obtener resultados positivos .

Esto genera un antecedente favorable para resolver la identidad de los herederos de Ernestina Herrera de Noble, ya que en las dos causas un allanamiento irregular modificó los resultados. Ante esto, Canicoba Corral convocó al joven apropiado a su despacho y requirió cuatro prendas de vestir. “De las cuatro prendas se obtuvo el mismo perfil genético y se utilizó el mismo material que en el caso Noble Herrera, lo que significa que el material es idóneo y que el problema es que en ese caso hubo algo raro”, agregó Iud.
Sobre el caso, el secretario de Derechos Humanos Eduardo Luis Duhalde opinó que en la búsqueda de la identidad de Rochistein-Tauro “se pusieron muchas trabas y la enseñanza que deja es que, como sucederá en el caso Noble Herrera, no consiguen evitar que triunfe el derecho a la verdad y la identidad”.

Fuente: Tiempo Argentino