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jueves, 25 de agosto de 2011

La Nazión y la amnistía

Crímenes de lesa humanidad



La Nación se empeña en aglutinar a sectores que tendrán representación parlamentaria para discutir una ley de amnistía. Pero no podrá prosperar porque la Argentina violaría sus compromisos internacionales.


En medio del debate por las implicancias que sobre bienes de desaparecidos pudieron tener las incursiones de Graciela Alfano en la cama del Almirante Massera, La Nación insiste en la libertad de policías y militares en su editorial del 21 de agosto de 2011. Analiza los resultados de las primarias y menciona el tono conciliador de la presidenta para sostener que, como la confrontación no puede seguir siendo un instrumento, la pacificación y la reconciliación se avecinan, debiéndose superar la mirada “teñida de interpretaciones sesgadas, asimétricas y vengativas del pasado”, productos del “color de un dogmatismo faccioso”.

Tal vez como premio consuelo, La Nación se empeña en aglutinar a sectores que tendrán representación parlamentaria para discutir una ley de amnistía. Pero no podrá prosperar porque la Argentina violaría sus compromisos internacionales, tal como los jueces han dejado en claro al decidir sobre el concepto de “crímenes de lesa humanidad”, que además de ser imprescriptibles, no pueden ser olvidados ni perdonados.
El diario de los Mitre regresa a la teoría de los dos demonios y a su desconocimiento de la geometría, para hablar sobre la omisión de una mitad de los hechos y que hubo presión sobre la justicia arrasándose principios como la irretroactividad de la ley penal y la cosa juzgada para llevar a juicio a más de 1000 miembros de las Fuerzas Armadas y de Seguridad.
Refiere que no se juzgó a los “terroristas” que esas fuerzas combatieron, reavivando los conceptos de la propia dictadura para reclamar impunidad y reivindicar la masacre, llevada a cabo, agrega, privilegiando la eficacia y la urgencia (léase “utilización de la tortura como modo de obtener información”). El diario dice que eso derivó en “excesos” y violación de Derechos Humanos. Pero en la matriz del plan de contrainsurgencia estaba la implementación de la tortura y el alojamiento de las víctimas en lugares clandestinos, vedados a todo juez, fiscal y abogado.
Para el diario, la represión nació como una reacción a una acción previa, ocultando que la represión política se instaló como práctica militar y policial a partir de 1955, se intensificó en los ’60 con la incorporación de la doctrina francesa y luego con aporte de los estadounidenses, para convertirse finalmente en plan de exterminio durante los ’70.

La ESMA fue lugar de detención de sindicalistas a fines de los ’50, juzgados por tribunales militares por el solo hecho de no disciplinarse ante el patrón. Ni hablar del bombardeo a Plaza de Mayo en 1955, donde la Marina utilizó sus aviones para descargar miles de kilos de bombas sobre una población indefensa. O la masacre del 22 de agosto de 1972 desatada contra presos políticos en Trelew, o la tortura en las seccionales policiales.

Lo que en verdad dice en su editorial es que como la clase obrera reclamó ser un actor político y debatir sobre el reparto de riquezas, el diario de los Mitre y los mentores de la masacre los tildan de “subversivos” –gente sin ningún derecho– para atacarlos más allá de toda ley.
Se queja el diario, porque Alfonsín no pudo evitar que luego del juicio a las juntas militares, los tribunales federales avanzaran en el enjuiciamiento de otros oficiales y suboficiales, lo que hizo necesarias las leyes de punto final y obediencia debida, alzamientos militares mediante, a los que La Nación reivindica y erige como fuente de pacificación; pero llegó Kirchner, que “presionó” al Parlamento para declarar nulas esas leyes. Interesante modo de describir la prepotencia militar como fuente de legislación y la discusión política como presión.
Se queja de que a los “terroristas” no se los juzga ni se reconoció a sus víctimas. Luego hace una serie de imprecaciones que carecen de rigor histórico, pero que no duda en calificar de “disociación social”, relacionando esas “rémoras ideológicas” con la aversión al mantenimiento del orden público, la represión del delito común, la inseguridad ciudadana y el piqueterismo.
A modo de conclusión y en tono intimidante,sostiene que las Fuerzas Armadas entendieron que el poder civil emanado de la Constitución debe ser respetado, pero advierte que la sociedad civil debe recuperar el respeto hacia ellas “en la seguridad de la paz”.

Que hijos de remil puta asesinos como a los nazis les va a pasar a donde vayan los iremos a buscar !!!!!!!!!!!

A la par, otros medios de comunicación, como Canal 5, cubrieron el acto para recordar al coronel Argentino Larrabure, fallecido en cautiverio a manos del ERP, en el que se insistió en la “memoria a medias”. Este fue uno de los casos que el sector militar llevó a la justicia para equipararlos a los de lesa humanidad, con el apoyo de La Nación, que el 24 de agosto de 2008, publicó una nota sobre esa presentación, bajo el título “Derechos Humanos”. Y si bien el padecimiento que atravesó Larrabure no tiene justificación, no es un crimen de lesa humanidad, como no lo fue ninguno de los que cometieron las organizaciones armadas, por no haber sido parte de un ataque sistemático o generalizado contra una población civil, realizado como política estatal. Y el otro elemento que diferencia a unos de otros es que el caso Larrabure contó con información estatal sobre la existencia del crimen, tuvo cobertura en los medios de comunicación, los deudos recibieron atención e intervino el sistema judicial que investigó los hechos.
Por el contrario, los crímenes de lesa humanidad fueron ocultados desde el Estado, no hubo juez ni fiscal (a quienes les vedaron toda información), y los grandes medios, como La Nación, los encubrieron como “enfrentamientos”. La desmemoria para ocultar complicidad. Y que la Alfano siga hablando con la mermelada.

Fuente: Tiempo Argentino

5 comentarios:

Abel dijo...

Muy buena nota. Lo que resulta increíble es que a éstas alturas del partido todavía se siga pretendiendo confundir los tantos. Se hacen los inocentes, como si no supieran qué es un delito de lesa humanidad.
Por suerte, aunque se junten todos, y menos después de la nueva composición del Congreso luego de octubre, cualquier intento o proyecto de ley en esa dirección, no tiene posibilidad de pasar

Ricardo dijo...

Aunque a Abel no le guste, voy a seguir con la rima:

Es muy buena la nota
Amnistía las pelota'.

Daniel dijo...

Hay que avanzar con la complicidad civil.
Tenemos que presenciar que tipos como Gelblung, Fontevecchia, Grondona opinen y se enojen con tanto desparpajo cuando deberían estar en la cárcel.

Javier dijo...

Hay una pelicula que se llama Nazion , me llego la ibnnvitacion para este miercoles 19:00 en la biblioteca nacional

Espero que sigamos avanzando judicialmente sobre los responsables civiles y esta en nosotros presionar para lograrlo

Abrazo

Javier dijo...

Compañeras y Compañeros:

Los invitamos a asistir a la proyección de la película Nazion.

EQUIPO DE COMUNICACIÓN

NAZION
La historia ideológica de la ultra derecha en Argentina.

Idea original de Leopoldo Nacht
Dirigida y escrita por Ernesto Ardito
Con las voces de Cristina Banegas y Tony Vilas


MIERCOLES 14 DE septiembre A LAS 19 HORAS



BIBLIOTECA NACIONAL – Sala Cortázar



Entrada Libre y Gratuita

Abierta a todo público

Coordinadora Sindical Clasista - Partido Obrero

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