Por: Mario Huck
Por casa desfilaron Carlos “Chacho” Alvarez, Juampi Cafiero, Víctor De Gennaro, Claudio Lozano, y muchos más. Las discusiones eran apasionantes y recuerdo que generalmente salían casi desahuciados porque llegaban con alguna posición tomada y salían con la que Germán les planteaba, insultándose a sí mismos por sus argumentos iniciales.
En aquellas tenidas políticas Germán discutió con Chacho Álvarez sobre la oportunidad de la conformación de la Alianza con la UCR para enfrentar a Carlos Menem. Germán se oponía, porque consideraba que el radicalismo los iba a terminar traicionando y porque el Frente Grande perdería su propia identidad.
“Es preferible intentar un camino autónomo, independiente, propio, que al principio a lo mejor es tan doloroso como el otro, pero el final del camino es nuestro; estamos construyendo nuestra nueva sociedad”, sostenía con claridad.
Era un tipo de convicciones firmes y las aplicaba hasta en el más mínimo detalle. Le gustaba veranear en Santa Teresita, donde nació, o en Mar del Tuyu. Nos hacía levantar a las 5 de la mañana para que fuéramos a pescar al muelle. Pescar, según él, lo ayudaba a pensar y reflexionar. Un verano viajamos los diez a la costa en una camioneta Ford Falcon y nos quedamos sin nafta porque Germán sólo cargaba en YPF.
Sus posiciones eran de avanzada y sus argumentos tienen hoy una actualidad notable.
Cuando la enfermedad lo afectó empezó a producirse un cambio notable y notorio en su físico. Su cuerpo se iba consumiendo, en la misma medida en que su cabeza, su pensamiento de dirigente con mirada hacia el futuro se iba expandiendo.
“Va a haber dirigentes que van a ser mayoría en el movimiento obrero y que van a ser consecuentes con su mandato, va a haber dirigentes políticos que no van a tomar la política como parte del jet-set y la frivolidad, que intentarán cambiar la sociedad. Entonces, en ese momento, cuando se modifiquen esas relaciones de fuerza, estas legislaciones que hoy parecen terribles derrotas, las vamos a cambiar a todas.” Nunca transigió, nunca entregó las banderas. Germán era el mejor de todos, y lo extrañamos.
Fuente :Tiempo Argentino
1 comentario:
Que buen recordatorio, Javi!! Y pensar que me toca sentir la trayectoria de Germán con recortes y videos, armando el rompecabezas de esa fenomenal, heroica trayectoria!! Recuerdo cuando entrado en mi pubertad me preguntaba por ese hombre de apellido árabe, tan reivindicado por mi madre, y hoy la internet y el archivo posibilita aproximarse a la memoria de Germán. Te felicito, Javi, y si bien sé que hoy sus posiciones dan lugar a un debate en el interior del progresismo que da lugar a perspectivas diferentes, es muy bueno retomarlo como aporte teórico a la militancia.
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