The people united will never be defeated - ¡Proletarios del mundo, uníos!

jueves, 23 de octubre de 2014

Mariano Ferreyra: "un crimen de Estado contra la clase obrera"



23 de octubre de 2014 | Edición Impresa #1337 | Por Partido Obrero
 
Discurso de Jorge Altamira en la conmemoración del cuarto aniversario del asesinato de nuestro compañero Mariano Ferreyta en Pedriel y Luján, donde ocurrió este crimen infame contra los trabajadores.

Compañeras, compañeros:

En este lugar, hace cuatro años, los enemigos de la clase obrera, los enemigos jurados e irrevocables de la clase obrera, asesinaron a nuestro compañero Mariano Ferreyra e hirieron gravemente y durablemente a nuestra compañera Elsa Rodríguez. Cuatro años después, Mariano Ferreyra sigue presente en el escenario político del país. Es la mejor demostración de la naturaleza de la lucha que estaba emprendida; Mariano es objeto de una lucha política en la que el Estado pretende desvirtuar el significado de ese combate y de ese asesinato. Sin embargo, el ataque a los compañeros ferroviarios y organizaciones solidarias, el 20 de octubre de 2010 fue un crimen contra la clase obrera de este país y fue un crimen del Estado argentino contra la clase obrera de este país,y esta acusación es irrevocable. Esta acusación se va a levantar cuando la clase obrera de este país termine con este Estado de este país y construya una perspectiva política de los trabajadores (aplausos).

Es un crimen contra la clase obrera porque la lucha que estaba emprendida era una lucha absolutamente vital, y lo sigue siendo hoy para los explotados de este país: la lucha contra la tercerización laboral, la lucha por recuperar derechos históricos de la clase obrera conquistados a través de décadas y décadas, no sólo de movilizaciones sino de derramamiento de sangre de los trabajadores. Fue tan intenso el significado de este "crimen político contra la clase obrera", que al día siguiente, el 21 de octubre, numerosas fábricas, varios sindicatos, entendieron que respetaban la voluntad de los trabajadores declarando paros parciales e incluso paros de todo el día, de 24 horas.

Fue un crimen de Estado que los kirchneristas no van a poder levantar jamás, porque la burocracia sindical, la Policía Federal y los concesionarios del ferrocarril son parte del aparato del Estado capitalista que protege la explotación de la clase obrera.

Fue un crimen de Estado, y a la cabeza del Estado está la Presidenta de la Nación, que al día siguiente denunció a la Federación Universitaria de Buenos Aires por romper una puerta del Ministerio de la Educación, como una muestra de la violencia que anima a la juventud argentina y justifica los crímenes de Pedraza. Habría que haber puesto el audio, en la Legislatura de la Capital hoy y en la Municipalidad de Avellaneda, con la Presidenta indignada por la rotura de la puerta del ministerio y ninguna palabra sobre Mariano Ferreyra. Hay que poner el audio con los planteos en ese momento. Una gigantesca movilización se produjo al día siguiente y el gobierno no tuvo el recato, siquiera, de apagar las luces de la Casa Rosada, en mínima señal de duelo, y los que brillaban con sus luces ese día, cuatro años después reivindican a Mariano Ferreyra.

¡Claro que indigna!, pero dejemos la indignación. Esta es una lección política fabulosa: esta gente, como antes de ellos, lo mismo que ellos, aquí como en todos los países del mundo, van a mentir, van a engañar, van a utilizar todos los recursos propios del sinvergüenza político, para evitar que un trabajador saque la conclusiones que corresponden de las experiencias que vive:¡y qué experiencia más brutal que la experiencia de ver caído un compañero en la lucha! Y durante seis meses siguieron una línea de ataque al Partido Obrero y a Mariano Ferreyra, reflejado en un corte de vías posterior, en la que fueron detenidos compañeros del Partido Obrero, incluso dirigentes del Partido Obrero, acusados de disturbios en la estación Constitución, montada por el propio pedracismo, que tiene en la propia estación un polígono de tiro. Y la ministra de Defensa, Nilda Garré, acusando -por todos los medios públicos- al Partido Obrero de la ejecución de nuevos hechos de violencia. Estos sinvergüenzas hoy descubren placas y pegan afiches en nombre de Mariano Ferreyra. Es un crimen de Estado, es decir que el que tiene que ser condenado es el Estado, y la condena del Estado, cuando ocurre, la pena que se aplica es el derrocamiento del Estado.

Es un crimen de Estado que buscaron preservar, como lo demuestra aquella conversación telefónica entre Pedraza y el ministro de Trabajo. Era una polémica, Pedraza que reclamaba que no pasen a planta permanente los tercerizados, porque esto sería una victoria de la izquierda, y Tomada que le decía "tomátela con calma, laváles la cabeza, pasálos para nuestro lado y esto se disipa". Y cuatro años después no se disipó, crece la izquierda en el movimiento obrero, crece la izquierda en la juventud, no le lavan la cabeza a nadie porque se desarrolla la conciencia de clase y la conciencia socialista de los trabajadores. Los lavadores de cabeza, hoy en Avellaneda y en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, le hacían un homenaje a Mariano Ferreyra. ¡Son unos sinvergüenzas! Pero no engañan a nadie, se engañan a ellos mismos. Los trabajadores les van a pasar la factura por tanta estafa política. Esto es lo que dejó Mariano Ferreyra.

Y el propio juicio oral ha sido una estafa política, porque excluyó de ese juicio a la patronal, al ministro Aníbal Fernández, a la Policía Federal, excluyó de ese juicio al núcleo más importante del aparato del Estado. Por eso lo hemos impugnado. El valor de la lucha política del Partido Obrero consistió en que, desde el primer día, delimitamos los campos y dijimos: acá está la clase obrera, por un lado, acá está el aparato del Estado capitalista con todos sus verdugos y esbirros, del otro lado. Porque marcamos esa delimitación en esta lucha, fracasaron todas las cooptaciones, y el gobierno tuvo que admitir finalmente que la Justicia y la Policía detengan a Pedraza, detengan a Favale y detengan a la patota. Lo tuvo que hacer después de haber avalado y justificado ese crimen.

La intelectualidad kirchnerista -yo diría que casi sin excepción, porque la excepción que tengo en la cabeza fue una excepción vergonzante-, casi sin excepción, dijo: "bueno, es lo que ustedes buscaban, con este tipo de acciones debilitan al gobierno nacional y popular", es decir que la mejor forma de fortalecerlo es no hacer absolutamente nada en la lucha por los derechos. Jose Pablo Feinmann fue el primero en salir a defender a Pedraza, cuando simplemente se podría haber callado la boca. Esta gente le tiene terror al proletariado, saben con qué se va a enfrentar cuando la masas inauguren un gran ascenso definitivo, van a dejar de bastardear y de vivir a costa de los trabajadores, recogiendo las migajas del Estado en los canales de televisión y en los ministerios.

Esta pequeña burguesía intelectual reaccionaria que se viste de progresista son nuestros enemigos, los peores, porque a Berni lo reconocemos andando. Berni tiene un prontuario que arranca en las minas de Río Turbio como infiltrado, hace dos décadas. Estos otros son peores. Otra cosa más: ¿algo cambió?No cambió nada y no podía cambiar. Toda la porquería volvió a subir a la superficie apenas los trabajadores de Gestamp ocuparon la planta un fin de semana- la Presidenta, desde Santa Cruz, pronunció un discurso como el que pronunciaba contra Mariano Ferreyra, acusando a los trabajadores de Gestamp de querer tomar el Palacio de Invierno, que como ustedes se darán cuenta es la acusación máxima que puede hacer un dirigente capitalista contra los luchadores. Es la acusación mayor: pena capital, pelotón de fusilamiento, "el tipo quiere tomar el Palacio de Invierno, quiere inaugurar una nueva época histórica, hay que aniquilar a los trabajadores de Gestamp". La toma del Palacio de Invierno fue un factor poderoso de mejoras sociales en numerosos países, y los trabajadores de Gestamp estaban luchando contra los despidos. Entonces, la jefa de Estado, como en octubre de 2010 con la puerta del Ministerio de Educación, sale a bajar línea: pegue, hay que pegar a estos trabajadores. Poco tiempo después, con motivo de cumplirse el 40° aniversario del 1° de mayo de 1974, la misma Presidenta, con su alter ego intelectual, Horacio Verbitsky, descubrieron -con cuarenta años de demora- que la juventud peronista había hecho mal en retirarse de la Plaza de Mayo en 1974, que tenía que haberse quedado ahí junto al gobierno de las Tres A; con cuarenta años de demora, rechazaban y acusaban el gesto más importante de la juventud peronista, aplaudido por el Partido Obrero, el 1° de mayo de 1974, de romper con el gobierno de la Triple A, lamentablemente sin dirección política.

Todo gira en torno de lo mismo: "no saquen los pies del plato". Este Estado es un único Estado, no se puede estar en contra del Estado, pueden ocupar tres bancas, pueden hablar ocho minutos, pueden participar del trabajo de comisiones, pero ¡cuidado con atentar contra este Estado! Los obreros de Gestamp luchan contra la desocupación, contra los despidos y viene el ataque. Ahora, no sé bien quién fue, hoy, uno de éstos, De Pedro, no sé quién, de La Cámpora, pronunció un discurso por Mariano Ferreyra. Pero ¿dónde estuviste, muchacho, el 20 de octubre de 2010? Pero dejemos el 20: el 21... el 21, ¿no moviste el culo ni fuiste a la Plaza de Mayo, como fueron tantas familias de trabajadores?

Como ustedes ven, la pasión del Partido Obrero por Mariano no es una pasión emocional; es una pasión que nace de las mayores convicciones, de una comprensión del momento histórico, de una disposición para pelear este momento histórico. Nosotros sabemos bien por qué Mariano estaba acá con ese piquete el 20 de octubre, y nosotros hubiéramos estado ahí si las circunstancias de la lucha nos hubieran puesto en esa manifestación. Fue una lucha de muchos años, y ahora que se critican piquetes, los cortes de vías, los piquetes ferroviarios, todo esto se encuentra en la línea de todo lo que había hecho el movimiento piquetero. Vean ustedes cómo algo que nace de la conciencia y dela lucha del trabajador se transforma en un arma colectiva, porque los piquetes siguen, siguen en ese desarrollo, en esa perspectiva - y en la medida en que sigan esa perspectiva, que no la desnaturalicen.

El piquete del 20 de octubre fue un piquete de frente único de trabajadores, no eran una ni dos, sino numerosas organizaciones las que participaban; quizá no todas, pero las que participaban actuaban en frente único, discutían en asambleas, sacaban conclusiones comunes y lo hacían en un terreno francamente desfavorable. La presencia de un canal de televisión aquel día, aquí, fue fortuita, y permitió, ayudó a develar lo que había ocurrido en la calle, pero fue fortuita.

Ahora, ¿qué tenemos? Tenemos un gobierno que, según los diarios, recuperó la iniciativa política. Dice: "recuperé tanto la iniciativa política, que le voy a hacer un homenaje a Mariano, me voy a mofar de ustedes". Pero los que piensan que este gobierno recuperó la iniciativa política, están mirando el canal equivocado, porque es una maquinaria de aprobación de leyes en el Congreso, perfectamente vacía de contenido. Hay una ley de pago soberano, que caducó en el momento en que pusieron la firma, porque la ignoraron todos los capitalistas, y su única función ha sido advertirle al capital mundial que este gobierno está dispuesto a pagar toda la deuda externa argentina con la última gota de sangre de los trabajadores, cueste lo que cueste.

Toman otras medidas: incrementan las deudas; antes las deudas se incrementaban por diez años y ahora las deudas se incrementan por ocho meses. Dentro de ocho meses hay que pagarla. Ya estamos pagando la deuda a Repsol; hay que gente que todavía no se enteró que se le pagó con una deuda y ya se está pagando esa deuda en efectivo.
Es todo ficticio, es una gran espuma, es un aparato de propaganda sostenido por los así llamados ‘opositores', que al igual que el gobierno, quieren pagar todo lo que haya que pagar, porque el 60 por ciento de esa deuda está en manos de la clase capitalista local, de la burguesía nacional que Néstor Kirchner quería reconstruir. Es una gigantesca ficción que los trabajadores, todavía, no pueden desgarrar o no desgarran por una insuficiencia de organización, por una insuficiencia de dirección, pero que están avanzando en esa organización y en la construcción de una dirección.
Todo está por jugarse en este país en los próximos meses y años, y por lo tanto, este acto conmemorativo no es un memorial a Mariano Ferreyra, sino un programa para terminar con la dominación de la burguesía, en primer lugar, constituyendo una poderosa alternativa política de los trabajadores y ése es nuestro objetivo en el Luna Park, el 8 de noviembre próximo, al cual todos tienen el deber de concurrir.

Gracias, compañeros.

 Fuente : http://www.partidoobrero.com/prensaObrera/1337/politicas/mariano-ferreyra-un-crimen-de-estado-contra-la-clase-obrera-4

No hay comentarios:

Coordinadora Sindical Clasista - Partido Obrero

Coordinadora Sindical Clasista - Partido Obrero

Politica Obrera