Edición Impresa #1374 | Por Alejandro Guerrero
Daniel Yofra es el secretario general de la Federación de Aceiteros, el sindicato que perforó el techo que el gobierno les quiso imponer a las paritarias. Lo perforó con una huelga general por tiempo indeterminado que duró tres semanas, hasta que logró una victoria resonante. Esa huelga detuvo el comercio exterior con piquetes y conmovió al cordón industrial santafesino y a todo el país. Ahora, Yofra ha declarado su respaldo a la Lista Unidad del Frente de Izquierda y anunció que se incorpora a la campaña por la fórmula Jorge Altamira-Juan Carlos Giordano.
Durante un acto en Neuquén, Altamira destacó el ejemplo de Yofra, "porque cualquier obrero comprende que en una lucha política en la que hay un bando capitalista y un bando obrero, la medida de los obreros es la lucha contra los capitalistas". En cambio, la otra lista del Frente de Izquierda que concurre a las Paso ataca, sobre todo, al precandidato presidencial de la Lista Unidad.
En cuanto a la "renovación" que propone el PTS, Altamira indicó: "La burguesía dice, porque me lo han dicho muchas veces en encuentros en estudios de televisión: ‘La puta, qué tenacidad, ahora estás viendo el fruto de cuarenta años de lucha’. Y donde todo el mundo ve el fruto de cuarenta años de lucha, ellos ven una especie de extinción. No tienen sentido del ridículo".
Además, añadió Altamira, el intento de poner a la izquierda ante un conflicto generacional constituye "un retroceso ideológico, político y teórico, un retroceso hacia la prehistoria (...) eso es propio de los partidos capitalistas. ¿Por qué hay un conflicto generacional entre los capitalistas? Porque de los más viejos ya se sabe que son ladrones. Estuvieron veinte o veinticinco años robando todo lo que pudieron. La gente se dio cuenta, los quiere echar y entonces dicen: ‘traete algo, alguien... jovencito’. Entonces, uno dice ‘¿por qué jovencito?' Porque no tuvo tiempo de robar".
Altamira hizo hincapié en la necesidad de mostrarles a los votantes
independientes el proceso de fusión con la izquierda revolucionaria de
direcciones obreras de gran tradición, y que ese proceso se desarrolla
en la Lista Unidad: "Una dirección, como la de Aceiteros o el ‘Perro’
Santillán; está con nosotros el PSTU (...) el Frente Darío Santillán,
Pueblo en Marcha, Pueblo Unido ¿Por qué todo el mundo está detrás de un
planteo de unidad, y hay alguien que se corta solo? Es el punto de vista
del faccionalismo, una enfermedad política que estalla y pone de
manifiesto todas sus miserias cuando el movimiento revolucionario se
pone en ascenso, cuando se pone en marcha y va conquistando
posiciones...".
El PTS, como se sabe, sostiene que el de Cristina Kirchner es un
gobierno reformista. Altamira, al referirse a esa sorprendente concesión
al kirchnerismo, señaló en Neuquén: "Miren ustedes lo que se dijo acá.
Que por medio de un sabotaje a Zanón se está logrando lo que la patronal
de Zanón no logró, que es el éxodo de obreros. Como además ya le
pagaron la indemnización a la patronal de Zanón, el negocio es redondo
(...) si el gobierno está hundiendo a Zanón y lo está saboteando, ¿por
qué dicen que el gobierno kirchnerista es reformista? ¿dónde vio el
reformismo un obrero de Zanón? Reformismo habría sido que le dieran
créditos para producir. Tienen delante de los ojos el sabotaje del
gobierno kirchnerista al proceso político y social más importante de
Neuquén y dicen que es un gobierno reformista... Han perdido el rumbo
político".
Acerca del rechazo del Partido Obrero a una polémica televisada con
Nicolás Del Caño, Altamira indicó que "vemos en ese debate una fuerte
carga faccional, cuyo propósito es desmoralizar al electorado del Frente
de Izquierda sobre nuestras perspectivas. ¿Qué otro propósito podría
tener? Imagínense, yo polemizando con Del Caño. Yo tendría que decir
cosas duras, y no quiero decirle cosas duras a Del Caño delante del
electorado que tiene que votar al Frente de Izquierda. Quiero decir
cosas buenas de Del Caño, porque si digo cosas duras de él, estoy
saboteando al Frente de Izquierda (...) cuando rehusamos el debate,
rehusamos desmoralizar a la clase obrera con una crítica que, por el
momento político y las circunstancias, estaría fuera de lugar. Estamos
dando toda una lección política. Nos contenemos, nos restringimos,
toleramos que se digan pavadas, porque el interés general es el
desarrollo de una gran votación al Frente de Izquierda para disputarle
la lucha electoral a los partidos patronales".
"Por lo tanto -prosiguió nuestro precandidato presidencial-, nos
estamos capacitando mucho más que antes para ser gobierno. A nosotros no
nos va a pasar lo que a Syriza, que cuando el 62 por ciento del pueblo
le dice no al imperialismo, ellos interpretan que es un acuerdo con el
imperialismo. No nos va a pasar porque nosotros, por medio de esta
experiencia, vamos desarrollando una homogeneidad y una estrategia.
Disipamos las ilusiones que el centroizquierda y otros tienen en el
capitalismo (...) El poder político se va desmembrando desde arriba,
porque tiene el problema de imponerle un ajuste a un pueblo que resistió
el ajuste anterior por medio de una rebelión popular".
Altamira subrayó que "el proceso económico está yendo al abismo (...)
por lo tanto, estamos ante un gran desafío. Si hay una rebelión popular,
el Frente de Izquierda la tiene que encabezar (...) entonces cuidado,
compañeros, que el árbol no nos impida ver el bosque. No hay que dar por
el pito más de lo que pito vale. Hay que ser pacientes, hay que
explicar los problemas y tener en cuenta que defendemos el interés
general de la clase trabajadora. Nosotros vamos a encabezar una rebelión
popular con el método político con el que hemos formado el Frente de
Izquierda, en términos unitarios".
"Los socialistas -concluyó Altamira- nunca defendemos intereses
particulares, nos distinguimos por defender los intereses que el
movimiento obrero ha tomado en su conjunto, en su perspectiva histórica.
El Partido Obrero subordina enteramente su política al desarrollo del
Frente de Izquierda. No coloca intereses propios por delante de lo que
se ha construido en este tiempo y que funciona como un canal por el que
transitan los trabajadores".
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