The people united will never be defeated - ¡Proletarios del mundo, uníos!

martes, 1 de febrero de 2011

Sentir orgullo de lo que somos


Por Roberto Caballero
Director.

Tanto nos ha maltratado el periodismo corporativo berreta, que los argentinos nos convencimos de que somos un paisito allí donde el mundo pierde el nombre sin nada más que ofrecer más que soja.
Cualquiera de nosotros, por inoculación de décadas en el inconsciente colectivo, puede decir tres o cuatro defectos bien nuestros en apenas segundos, pero si se trata de reconocer algún talento, enmudecemos primero y terminamos hablando de fútbol.

La hegemonía cultural, patrimonio de una clase dueña, además, del poder y del dinero −que hoy se expresa en Clarín y La Nación−, nos tiene convencidos de que tenemos una especial inclinación por el fracaso colectivo y que el único argentino que vale la pena es el que triunfa solo, en la medida de lo posible, hablando mal de los otros argentinos. Y, sin embargo, la riqueza de ser argentino es infinita. Hay que sentir orgullo de lo que somos, y de lo mucho que construimos en estas casi tres décadas de democracia.

Cuando Cristina y Dilma anunciaron ayer la firma de convenios en materia nuclear para fines pacíficos entre Brasil y la Argentina (que Tiempo Argentino adelantó el sábado), asistimos a un hito tecnológico pero también político en la relación entre los dos países, que cuentan con los dos PBI más grandes de toda la región. En el pasado, la Argentina era una hipótesis de guerra para Brasil, y viceversa, pero desde 1984, cuando Alfonsín y Sarney comenzaron el deshielo, se avanzó a pasos gigantes: hoy somos socios reales, pese a que esto no le guste a los Estados Unidos y a sus “periodistas cautivos”.

Claro, la prensa hegemónica no puede admitir que nuestro país es una potencia en materia nuclear, no puede asumir que los reactores por construir se harán con tecnología argentina, no puede destacar que Dilma eligió como primer viaje oficial Buenos Aires como gesto de reafirmación de la alianza regional, porque de hacerlo estaría conspirando contra sus propios intereses. Nos quieren convencer de nuestra imposibilidad para que bajemos los brazos, y así hacer con nosotros los que le venga en gana. No sé, algo me dice que esta vez no van a poder.




Fuente :El Argentino

1 comentario:

Daniel dijo...

Cada vez más, "los dos países".
Cinco años clave tenemos para dar el espaldarazo definitivo. No nos durmamos.

Coordinadora Sindical Clasista - Partido Obrero

Coordinadora Sindical Clasista - Partido Obrero

Politica Obrera