Para Pedraza perpetua

No way José. Final del juego

Por Andrea Sosa Alfonzo.

El tablero que armó el titular de la Unión Ferroviaria (UF) José Pedraza, comenzó a desmoronarse cuando el pasado lunes junto a otras cuatro personas fueron procesados por presunto tráfico de influencias y pago de sobornos en la causa por el asesinato del militante del Partido Obrero, Mariano Ferreyra.

Este lunes pasado, José Pedraza imputado en la causa por el asesinato de Mariano Ferreyra, recibió la peor noticia. Los que luchan por justicia, percibieron un primer paso hacia la consagración de una lucha reivindicativa a casi tres años del crimen, en lo que puede dejar al descubierto una entramado entre el sindicalismo de la Unión Ferroviaria, el accionar policial y una red de corrupción que llega hasta la misma Justicia.

El juez Luis Osvaldo Rodríguez, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal de Instrucción Nº 11, dispuso este lunes el procesamiento de José Ángel Pedraza en el marco de una investigación por los delitos de tráfico de influencias y pago de sobornos. Con el objetivo de evitar su excarcelación, Pedraza habilitó a sus amigos para que evitaran su prisión por el asesinato del militante. Los cuatro acusados de coparticipación y con un embargo de hasta 200 mil pesos, fueron el ex agente de la SIDE, Juan José Riquelme –intermediario para pagar la coima-, el prosecretario de Casación, Luis Escobar, el actual vicepresidente del Belgrano Cargas y contador de la UF, Ángel Stafforini y el ex juez Octavio Aráoz de Lamadrid.

La maniobra que descubrió la jueza Wilma Lopez mientras se llevaba adelante la investigación por el asesinato, hizo que se abriera una nueva causa al dejar en evidencia a través de las escuchas, un plan que se había puesto en marcha a pocos meses del asesinato de Ferreyra. José Pedraza junto al contador del gremio de la UF, Stafforini, debatían cual sería la suma para coimear y llevarle finalmente al entonces juez Octavio Araoz de Lamadrid: 50 mil dólares para evitar que la Cámara de Casación Penal dejara en libertad a los siete de la patota detenidos por el homicidio del militante y sentar las bases de una amistad para evitar en un futuro la prisión del propio Pedraza.

En diálogo con Marcha, Pablo Ferreyra habló de cómo comenzó la jornada 14 del juicio por el asesinato de Mariano Ferreyra, entre confusiones “testimoniaron algunos policías, en un clima de cierta confusión e información cruzada”.

Uno de los testimonios aportantes fue el de Eduardo Innamorato, que en 2010 dirigía la Dirección General en Seguridad e Investigación de Medios de Transporte. Declaró en la causa que era Antonio Luna –como mencionó Marcha anteriormente-el hombre de La Fraternidad que hasta hace poco ocupaba la subsecretaría de Transporte Ferroviario, quien arreglaba los adicionales de la policía en el ferrocarril, nada menos que 3200 agentes por día. Y agregó algunas cuestiones de importancia: primero, que “el gremio era quién manejaba todos los ingresos al ferrocarril y por ese motivo no quería que ingresaran los tercerizados”; luego, que “en los anteriores cortes de vía que llevaron adelante, nunca se había producido ningún incidente”. “Esta fue la primera vez que la Unión Ferroviaria se hizo presente en un corte”, afirmó.

Por otro lado y con respecto a la sentencia de Pedraza, Pablo mencionó que “la asociación de la otra causa para que mediante un soborno caiga la causa de Pedraza en un tribunal amigo, fue gracias a la habilidad de la jueza López, lo que permitió que se haya procesado a Pedraza” Y agregó: “Todo esto va a verse reforzado si se puede empapar este juicio contra Pedraza y la patota de esta otra causa, que terminan de demostrar –no sólo- el estado calamitoso de la justicia argentina, sino también el de los negocios de los ferrocarriles, el de los líderes sindicales como Pedraza que dictan un sindicalismo empresario que no duda en asesinar o dirigir patotas contra trabajadores que tienen reclamos legítimos”.

Por su parte y con respecto al procesamiento del perito de parte de la UF, Roberto Jorge Locles, que alteró como elemento de prueba, tras golpearla, la bala extraída del cuerpo de Ferreyra, Pablo lamentó que la prueba no tuviera “ninguna validez más que la fotográfica -en este sentido- es un procesado más, con lo cual un juicio más que muestra una actividad que vemos ya como habitual. No deja de ser significativo como se maneja Pedraza y la Unión Ferroviaria, que no dudan en recurrir a acciones fraudulentas como es ésta, el soborno y el asesinato”

Otro de los policías que testimonió durante la jornada de las contradicciones fue el comisario de la Comisaría N°30, Catalano, “fue tanta la confusión hasta cierto punto, que es posible que pidamos una vez finalizado el juicio que esta persona sea acusada igual que los otros policías, de algún delito de encubrimiento. Entre su relato y las grabaciones que se hicieron al Handy en el momento del hecho, hay incompatibilidades, como por ejemplo: dice que llegó al lugar sin saber que había heridos, y nosotros demostramos por medio de las grabaciones que le habían avisado que había heridos”

Para concluir Pablo mencionó que no sólo “intentó cubrir a los policías que estaban ahí y se intento cubrir él, sino que las incongruencias en su relato, nos muestra que no hizo una acción preventiva, estuvo ahí entre 10 y 15 minutos después de que asesinaron a Mariano” concluye Pablo.

Por último, uno de los policías que testimoniaron de la Comisaría Primera de Florencio Varela, citado por la Fiscalía, declaró que había entrado en contacto con Favale después de cometido el crimen, cuando Favale estaba prófugo.

El policía participó en los primeros intentos por apresarlo. Lo conocía muy bien a Favale porque era “un barrabrava habitual de Defensa y Justicia”, también dijo que lo conocía “porque fue a vender buzos a la Comisaria y sabía que tenía una remisería”. La primera vez que lo contactan, le piden ayuda en la búsqueda de Favale y sobre todo su participación en el allanamiento de la casa de éste. Cuando no lo encuentran, el policía recuerda la remisería y se dirigen hasta allí donde le deja un mensaje a Favale para que lo llame, y así fue que Favale lo llama inmediatamente dos o tres veces.

Fuente cercanas a Marcha, declararon que Favale tenía contactos con policías de Florencio Varela y en ese sentido los testimonios aportaron a la construcción y la traza de un perfil que se dibuja desde hace tiempo en este caso; Favale estaba fuertemente vinculado a la policía de su municipio como buchón, por eso su llegada y conocimiento de muchos de la fuerza, quienes no sólo lo conocían muy bien, sino además lo llamaban cuando estaba prófugo para brindarle información.

Fuente: Marcha