Final del Capitalismo : Qué aporta Patria Grande

sábado, 2 de agosto de 2014

Qué aporta Patria Grande

La izquierda que se reivindica chavista se ha reunido en un agrupamiento electoral denominado “Patria Grande”. Se trata de un cambio de nombre y de alianza, pues en 2013 la corriente La Mella formó “Camino Popular” con Lozano y De Gennaro, con un resultado electoral paupérrimo y un retroceso total en la UBA, su principal centro de militancia. El nuevo emprendimiento integra a La Mella con el Frente Popular Darío Santillán, el cual hizo una elección interesante en Rosario y La Plata, donde tuvo una participación circunstancial. Pero ahora paga el precio de una escisión a su interior.

La denominación Patria Grande alude a la unidad de América Latina sobre una base capitalista, lo cual es una utopía histórica. La crisis irrevocable del Mercosur, el fracaso del Alba y la formación de la Alianza del Pacífico lo demuestran sin atenuantes. La categoría de Patria no es inocente, esto porque significa la indiferenciación entre capitalistas y obreros y trabajadores, en definitiva entre explotadores y explotados. Es la etiqueta que justifica la regimentación de los sindicatos por parte del Estado. La nueva coalición representa un chavismo marginal -porque a diferencia del de Venezuela, carece de base social y de batallas reales- y tardío -cuando los límites de la experiencia bolivariana no son desconocidos ni si quiera por el PSUV.

Un comunicado de la fracción del FPDS-Corriente Nacional, que no integra la fusión, señala que “En este proceso no hemos podido acordar la necesidad de apostar a la construcción de una nueva izquierda (…) que no titubee a la hora de denunciar las medidas del gobierno que afectan al pueblo. Que priorice las coordinaciones y alianzas con organizaciones del espacio político de la izquierda popular en desmedro de los acercamientos a sectores de la vieja política”. O sea que constatan que Patria Grande es filokirchnerista y que se alía con sectores agotados.

En una entrevista en el portal K Paco Urondo, Itaí Hagman, referente de la flamante Patria Grande, se incomoda por el apoyo del gobierno K a la candidatura de Scioli. “Hay que organizarse para no retroceder (sic) y para profundizar (sic) en muchas discusiones”. “Nosotros vemos que hay una tercera etapa del kirchnerismo, que estamos viviendo ahora, donde hay una suerte de acuerdo para llegar sin problemas a 2015 y en ese marco han habido concesiones importantes”. Acorde con este ‘kirchnerismo de las fuentes’, en otro reportaje sostuvo que “de fondo, diría que no hay muchas diferencias” con algunos agrupamientos K, y con Unidad Popular de Lozano, y que podrían dirimir candidaturas en las Paso.

Patria Grande prepara la confluencia con grupos K ‘disconformes’ con la candidatura de Scioli. Lejos de denunciar el pago de la deuda usuraria que pagan los trabajadores, se han juntado con el Movimiento Evita frente a la embajada yanqui contra el fallo de Griesa, que ha sido aceptado por el tándem CFK-Kicillof, con la diferencia referida al momento de la ejecución. Por otra parte, la ausencia sistemática de estos grupos en las luchas obreras en curso es una monumental definición política de este patriotismo agrandado.

Ninguna de las notas periodísticas del nuevo grupo denuncia la represión cotidiana del gobierno K contra las movilizaciones obreras y de la izquierda contra despidos y suspensiones.

Las tendencias que forman Patria Grande han descubierto la lucha electoral con una demora fenomenal. Típicamente ‘basistas’ le han hecho asco a la acción política. El viraje de este kirchnerismo inconfesable hacia ‘la política’ obedece al crecimiento del Frente de Izquierda. Esto significa que entra en la pelea contra la izquierda de clase y socialista, como lo vino haciendo en la universidad y colegios. Su repudio a ‘la derecha’ es un taparrabos. No suma sino que resta.