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sábado, 14 de noviembre de 2015

Patria Grande, un apéndice de la campaña de Scioli

12 de noviembre de 2015 | #Preensa Obrera 1389 | Por Gabriel Solano 
 
Aunque Patria Grande encubra su llamado a votar por Scioli con una catarata de críticas al candidato del oficialismo, lo cierto es que su política apunta a reforzar la subordinación de la izquierda y las organizaciones populares al barco sin rumbo de un nacionalismo burgués decadente. Se inscriben en la misma orientación de Horacio González, Carta Abierta, Hebe de Bonafini y otros cooptados por el Estado, que prefieren votar con la "nariz tapada" antes que perder los privilegios recibidos a cambio de su respaldo al actual gobierno. 
 
Más que una campaña de "voto crítico" -o sea independiente y con un programa alternativo-, la política de Patria Grande es una división de roles al interior del campo oficialista para tratar de cautivar al electorado de la izquierda en general y del Frente de Izquierda en particular. Esto queda absolutamente probado al ver el trato preferencial que sus dirigentes han recibido de los medios estatales o privados que responden al kirchnerismo. El sistema oficial de medios ha decidido gustoso difundir las críticas de Patria Grande al kirchnerismo y a su candidato, porque al final de cuentas se concluye en el voto a Scioli. Para resumir: si Patria Grande no existiera habría sido inventado por el kirchnerismo-sciolismo para tratar de embaucar al voto de izquierda. 
 
La imposibilidad de armar incluso una campaña independiente choca con una limitación de fondo. Ocurre que para ello se requiere un programa y una estrategia alternativa, algo que Patria Grande no tiene. Hace un año, ellos propusieron la formación de un frente "contra la derecha" a los partidos del Frente de Izquierda y al "ala izquierda" del kirchnerismo, incluida La Cámpora. Obviamente, todos rechazaron los servicios de esta Celestina, que pretendía hacer negocio si el casamiento se consumaba. En nuestro caso, fundamos nuestro rechazo en que se trataba de un frente con una parte del aparato del Estado, responsable de la entrega de los recursos naturales, del pago de la deuda externa, del sostenimiento de la burocracia sindical, de la explotación de la clase obrera, del saqueo de los fondos jubilatorios. Por motivos igualmente principistas, ningún sector kirchnerista tomó en serio la propuesta de alianza con la izquierda. Las divergencias estratégicas son claras para todos... menos para Patria Grande. 
 
Sólo para hacer un acercamiento oportunista al electorado del Frente de Izquierda, Patria Grande nos recuerda ahora que en las elecciones generales llamó a votar por nuestro compañero Nicolás del Caño. Aunque para difundir esta decisión no pusieron ni el 5% del empeño que colocan ahora para hacer campaña por Scioli, la información que dan es tramposa. Ocurre que el llamado a votar al FIT se limitó exclusivamente a su fórmula presidencial, pero no así a los candidatos a diputados que pugnaban por ampliar la representación de la izquierda en el Congreso Nacional. Esta omisión no era casual: llamar a votar la lista completa del FIT era romper con La Cámpora, que mediante Axel Kicillof y Wado De Pedro encabezan las listas a diputados en la Ciudad de Buenos Aires y en la provincia de Buenos Aires. Pero votar por el ministro de Economía y por el secretario general de la presidencia convierte a Patria Grande en una colectora kirchnerista, no ya en el balotaje sino en las elecciones generales. 
 
Que ésta es la orientación que está en marcha se prueba en que en la Facultad de Ciencias Exactas los consejeros de Patria Grande votaron en el Consejo Directivo de la facultad una declaración que llamaba a votar por Scioli, en la que se reivindica la totalidad de la política educativa y científica del kirchnerismo. ¿Y el "voto crítico" dónde está? Pero como sobre llovido mojado, en el Colegio Carlos Pellegrini rompieron el frente de graduados que tenían con la izquierda para armar una lista con el kirchnerismo. Como se ve, el "voto crítico" fue a la izquierda, no a los candidatos de La Cámpora. 
 
La votación a Scioli, aun encubierta de críticas, debe ser entendida como un salto cualitativo en la integración de un sector de la izquierda al kirchnerismo, algo que puede ocurrir incluso con más fuerza en caso de un triunfo de Macri. Nuestra campaña por el voto en blanco, en cambio, se funda en primer lugar en nuestra lucha estratégica por la independencia política de los trabajadores.
 

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Coordinadora Sindical Clasista - Partido Obrero

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