The people united will never be defeated - ¡Proletarios del mundo, uníos!

viernes, 28 de febrero de 2014

“El KIRCHNERISMO es un gobierno que NO ES CREÍBLE PARA el AJUSTE, PERO LO ESTÁ HACIENDO él mismo”

“El KIRCHNERISMO es un gobierno que NO ES CREÍBLE PARA el AJUSTE, PERO LO ESTÁ HACIENDO él mismo”
Invitado a INFORME RESERVADO, Néstor Pitrola, diputado nacional por el FIT, aseguró que “el Partido Obrero viene anunciando que se daban las condiciones para un nuevo Rodrigazo. Es un estallido cambiario inflacionario y realmente tiene sus parecidos históricos, pero fracasó el congelamiento, el desendeudamiento, el congelamiento de precios, fue el fracaso de las devaluaciones progresivas que fueron importantes hacia fin de año. Entonces, se reunieron las condiciones y al gobierno le estalló una mega devaluación en la mano. Hay que tener una caracterización de la enormidad de la crisis, estallaron todas las contradicciones que viene acumulando el Kirchnerismo, que no resolvió ninguno de los problemas de fondo de Argentina”. “Estamos en una fase de la crisis, no hay estabilidad, y esta estabilidad ficcionada es una mesa tendida para la paritaria, que es la clave, el otro núcleo del problema”, exclamó. Ver: Sección TV


Hay que tener una caracterización de la enormidad de la crisis, estallaron todas las contradicciones que viene acumulando el Kirchnerismo, que no resolvió ninguno de los problemas de fondo de Argentina. Hubo toda una preparación, le dejaron a los bancos posicionarse en dólares, ahora sabemos que tenían miles y miles de dólares comprados que violentaban incluso la Ley. Ahora van al mercado a cambiarlos al dólar bolsa. La devaluación es un ajuste contra el pueblo, pero es un gran negociado de la banca. Luego, están pretendiendo que existe una estabilidad en 8 pesos, no la creemos, porque los desequilibrios económicos están todos presentes. El dinero que compraron en dólares a 4, venden a 10, lo ponen al 30 por ciento de interés, hicieron contrato a dólar futuro en el momento de la devaluación, cuando no se sabe cuál será la evolución definitiva del dólar. Hay un enorme negociado, hemos comenzado una recesión económica. Tenemos una transferencia de ingresos colosal de jubilados y asalariados al Estado y al capital y por vía del Estado va todo”, describió.

Según Pitrola, “estamos en una fase de la crisis, no hay estabilidad, y esta estabilidad ficcionada es una mesa tendida para la paritaria, que es la clave, el otro núcleo del problema”. “Quieren anclar la inflación vía los salarios. Esto sería lo más neoliberal de parte del gobierno popular y nacional. Eso sería liquidar el mercado de consumo. Los sindicatos deberían estar preparando una acción histórica. ¿Cuál es la proyección inflacionaria del 20014? Puede ser 40 o más. Tiene que haber un aumento de emergencia de 3 mil pesos para los trabajadores y jubilados, que se incorpore en la base de paritarias. Vamos a llevar el debate al Congreso. Vamos a llevar un paquete de leyes que tienen que ver con la defensa del trabajador. Creo que la CGT tanto de Calo como de Moyano están en cualquier otra cosa, en que pase el ajuste, se reúnen, discuten con la Presidenta. No están en unificar una acción del movimiento obrero para quebrar el núcleo del ajuste que es una inflación del 30 / 40 contra salarios del 20 / 25. Tenés las administraciones provinciales que están achicando, despidos de empleados de comercio por ejemplo en Santiago del Estero, hay un proceso de despidos masivos. Hay que quebrar esto, Calo no está en esto pero Moyano tampoco. Se dedicó a reuniones con Barrionuevo de fuerte contenido golpista, no vamos a negar que acá hay sectores de la oposición que querían la devaluación hace mucho tiempo”, exclamó Pitrola.

“El capital financiero, exportadores están conspirando siempre en función de sus intereses. Este gobierno no les sirve más, es asunto terminado el gobierno kirchnerista para la continuidad de sus negocios. El desenlace de esta crisis es un cambio de régimen económico y político. Ahí viene el debate. Planteamos un cambio desde el punto de vista de los trabajadores, pero la oposición no está en eso. Si lograran un retiro anticipado de Cristina, son operaciones que antes o en el 2015 están marcando que se necesita un cambio de régimen. Es decir, ahora ellos ¿qué promueven? La devaluación, ajuste hasta las últimas consecuencias. Hay una oposición cuyo programa no es otro que esto que está haciendo el gobierno, eso le advertimos al trabajador. El sindicalismo opositor esta enredado con esta oposición”, insistió el diputado nacional.

Por último, dijo: “Binner es un hombre de los exportadores del puerto de Rosario, fuertemente favoreciendo la instalación del juego que son capitales que ya sabemos la característica que tienen. Ha entrado en el modelo absoluto que plantea el capital financiero”. “Queremos que todo se discuta en el Congreso, deuda externa, apertura de cuentas de las privatizadas, qué vamos a hacer con los trenes, y el punto de apoyo que es un aumento salarial de emergencia, defendamos a las familias de los trabajadores y discutimos el plan económico. El Kirchnerismo es un gobierno que no es creíble para el ajuste, pero lo está haciendo él mismo. Cuando los trabajadores, el movimiento obrero, intervienen en defensa de sus intereses va a ser una defensa histórica de que el rumbo no sea el del ajuste, del ataque a sus condiciones de vida. Eso nunca es golpista. En absoluto. Es un debate que ya está superado por la experiencia histórica”, afirmó.

“No es que la izquierda gana la calle, sino que va a ser un factor para que el conjunto de los trabajadores nos pongamos en pie. Nuestra idea es unir al movimiento obrero a través de un Congreso de delegados electos, en asambleas en cada gremio. La vieja burocracia no se une nunca, y si se unen será para un pacto social. Yo creo que hay muchas condiciones diferentes con lo que pasa en Venezuela, la clase obrera tiene un peso en Argentina que no tiene allí”, declaró. “El lunes que viene vamos a anunciar un proyecto con el Frente de Izquierda y vamos a la lucha política. Son el punto nuestro del debate de toda la crisis. Algunos quieren revisar el presupuesto, pero es para que esté en línea con el ajuste. Nosotros queremos la prohibición de despidos, aumento de emergencia y de salario mínimo y a partir de allí discutir la crisis”, concluyó Néstor Pitrola.


En la fuente sepuede ver el reportaje en video 

Fuente: http://www.informereservado.net/informereservadotv.php?noticia=52387

A Repsol todo, a los docentes nada

docentes editorial

Las dos noticias que tienen en vilo al país en estos días tienen el valor de ilustrar, con una nitidez que sorprende, los intereses que representa el gobierno kirchnerista y, en especial, el giro que encarna el equipo económico encabezado por Axel Kicillof. Mientras se procede a una indemnización a los vaciadores de Repsol, saludada por toda la clase capitalista, se amenaza a los docentes con un decretazo que imponga una rebaja salarial, ya que en los planes oficiales debe servir para aleccionar a todo el movimiento obrero. Lo más importante, de todos modos, es que la “hoja de ruta” que el gobierno se ha trazado para querer superar su bancarrota económica y política lo pone al arbitrio del capital financiero internacional.

Rescatando a los vaciadores

El acuerdo sellado con Repsol equivale a una entregada nacional de proporciones inmensas. Es que la letra del convenio sorprende por la minuciosidad con la que se le asegura a Repsol el cobro de la indemnización acordada. Los 5.000 millones de dólares establecidos como indemnización entre el gobierno y Repsol por la expropiación del 51% de las acciones de YPF contarán con garantías especiales. Como los bonos que se emitirán cotizan aproximadamente al 80% del valor nominal, el gobierno se compromete a emitir un adicional de 1.000 millones de dólares más, hasta un máximo de 6.000 millones. En cualquier caso Repsol no podrá recibir nunca menos de 4.760 millones de dólares, incluso aunque decida vender los bonos no bien los reciba. Y la deuda se considerará cancelada no al momento de la entrega de los bonos, sino sólo cuando éstos hayan sido transformados en dólares. Así la operación adquiere todas las garantías de un pago en efectivo, dado que el cobro de los bonos no estará sometido a los vaivenes del mercado. El texto del acuerdo lo dice con todas las letras: “El acuerdo comprende las garantías para su pago efectivo”.

A los 6.000 millones de dólares de nueva deuda creada por el gobierno se le deberán añadir los intereses; estos serán superiores al 8% anual, una tasa usuraria que duplica, como mínimo, lo que pagan países de América Latina. Se estima que, hasta 2033, fecha de vencimiento de los bonos, los intereses serán equivalentes al capital, lo que totaliza pagos por 12.000 millones de dólares. Este beneficio se distribuirá entre Repsol y los bancos que se hagan de los bonos. Si Repsol resolviera mantener los bonos en su cartera, recibirá intereses anuales por entre 360 y 500 millones de dólares -más o menos lo que obtenía como dividendos cuando era propietaria de YPF. En el caso de los bonos 2024, que aún no tienen cotización, el Estado garantizará a través del Banco Nación las tres primeras cuotas de intereses. Las garantías a Repsol no terminan acá. El convenio establece que si surgen problemas de pago o embargos, el Estado deberá pagar de inmediato el saldo adeudado. De ocurrir diferendos, no serán los tribunales argentinos los que decidan, sino la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional. Para el gobierno “nacional y popular” se ha vuelto una moda renunciar a la soberanía de la Justicia argentina.

Aunque el gobierno presenta como positivo que Repsol renuncie a continuar los juicios contra el país, lo cierto es que se trata de una medida recíproca, que compromete a Argentina a renunciar también a los juicios contra la empresa. Los pasivos ambientales que el propio Kicillof había denunciado en el momento de la expropiación nunca fueron tasados y ahora no podrán ser llevados a la Justicia. Tampoco las investigaciones sobre vaciamiento empresario, que constaban en el Informe Mosconi elaborado por el gobierno.

De amenazar con no pagar un peso, e incluso declarar que la investigación probaría que es Repsol la que debería indemnizar a la Argentina, Kicillof nos dice que la legislación vigente obliga a este pago oneroso a los vaciadores. El “relato” termina sepultado bajo la Ley Nacional de Expropiaciones dictada por Videla y Massera en 1977, hoy vigente.

La cola que sigue

El objetivo declarado de “volver a los mercados” que el gobierno se había trazado ha sido tercerizado a Repsol. Será el monopolio petrolero quien colocará los “bonos soberanos” de Argentina en el mercado, con la salvedad de que los dólares se los quedarán ellos y la factura la pagará el país. Es que por muy entreguista que sea el acto indemnizatorio, los “mercados” siguen reclamando más. En la cola de los que esperan un resarcimiento están el Club de París, los bonistas que no han entrado en el canje y las empresas que litigaron en el Ciadi. Entre unos y otros se esconde el FMI. Los países que integran el Club de París ponen como condición para un acuerdo que el gobierno acceda a que el Fondo realice una auditoría de las cuentas nacionales. El nuevo índice de inflación dado a conocer el mes pasado es un primer paso del gobierno en esa dirección.

La “normalización económica” con el gran capital implicará la creación de una deuda inmensa. Si se suma a la ya comprometida con Repsol, estaríamos muy por encima de los 30.000 millones de dólares. Cristina Kirchner y Kicillof terminarían sus días como afiliados al “club de los endeudadores”, al costo de una cuota muy alta. Después de haber batido el parche del “desendeudamiento”, tendríamos una deuda pública de unos 300.000 millones de dólares: por lejos la más alta de la historia. Los elementos para una quiebra económica generalizada se van reuniendo a una velocidad inusitada.

A medida que el gobierno avanza en esta dirección, su capacidad de arbitraje se reduce a la mínima expresión. El factor decisivo pasa a ser el capital financiero internacional. Mientras en el pasado la cancelación de la deuda con el FMI era presentada como una medida de autonomía nacional para “independizarnos” del Fondo, ahora la indemnización a Repsol persigue el propósito declarado de una asociación con los monopolios petroleros internacionales como Chevron, y conseguir fuentes de financiamiento de los grandes bancos. Estas concesiones empujan a un cambio completo de la política económica, dándole completa libertad al capital para su acción. 


A los docentes, nada

El acuerdo entre el Repsol y el gobierno contrasta con las negociaciones establecidas con los docentes. La propuesta oficial de un 22% en tres cuotas más 2.000 pesos de presentismo a pagar en dos veces equivale a una rebaja salarial hecha y derecha. Contra una inflación prevista por arriba del 40%, es claro que el gobierno quiere que los salarios se reduzcan en relación con la inflación y el índice de devaluación. Reducir el salario en dólares es el nuevo grito de la clase capitalista. En el caso concreto de los docentes, el gobierno ya anticipó que piensa recurrir a un decretazo para imponer este objetivo.
La oposición tradicional no sólo apoya el acuerdo con Repsol, y el acuerdo con el Club de París y el FMI. También es partidaria de un ataque al salario. De Mendiguren ha pedido la suspensión de las paritarias -aunque ahora quiere “apurarlas” en acuerdo con la CGT- y Felipe Solá auguró que los trabajadores están dispuestos a aceptar “una rebaja salarial”. La oposición, que ha saludado la devaluación de la moneda, pide bajo el eufemismo de la necesidad de “un plan integral” realizar un ajuste que incluya un tarifazo generalizado y una nueva devaluación.

Huelga general

La docencia combativa de todo el país se ha convocado para resolver un paro para el 5 y 6 de marzo, y exigió a la Ctera y al resto de los sindicatos la huelga general para defender un salario igual a la canasta familiar. La burocracia, sea oficialista u opositora, no quiere saber nada con ello. Por eso han puesto en el freezer el paro convocado por ellos mismos. Actúan como lo que son: agentes del ajuste al interior del movimiento obrero. Pero la burocracia no es el factor decisivo en la situación. Ante los despidos en Córdoba, ya se han ocupado tres empresas metalúrgicas, lo cual marca un curso a seguir para enfrentar los despidos y suspensiones.
Asistimos a los últimos capítulos de un gobierno en disgregación, que se juega su sobrevivencia en una ofensiva contra los trabajadores. En oposición a la intención de “blindar” a Repsol y al gran capital, llamamos a “blindar” a los trabajadores, prohibiendo despidos y suspensiones, con un aumento salarial de emergencia de 3.000 pesos y un salario mínimo igual a la canasta familiar. Está planteado impulsar la huelga general por este programa y estructurar una salida independiente de los trabajadores.



- See more at: http://prensa.po.org.ar/po1303/2014/02/27/a-repsol-todo-a-los-docentes-nada/#sthash.FSPu3fq7.dpuf

jueves, 27 de febrero de 2014

Protesta social: los K aumentan la represión

La Gendarmería de Berni reprime en la Panamericana.
27/02/2014 Por

Presos por el reclamo de absolución de los petroleros de Las Heras, en Jujuy y en Las Heras. Berni quiere desaforar diputados de izquierda.


La Gendarmería de Berni reprime en la Panamericana.


Todo indica que la política del gobierno kirchnerista -que en el pasado se jactaba de no reprimir la protesta social, aunque de hecho lo hubiera hecho o recurrido a patotas para tercerizar la represión- está incrementando los grados y métodos de criminalización de la protesta social.

Esta semana fue prolífica en hechos que así lo muestran.
En Las Heras se detuvo a cinco trabajadores petroleros por protestar, incluso dos miembros de la comisión directiva del Sindicato Petrolero de la provincia. La jueza subrrogante Hormaechea anunció el día de ayer que les negaba el pedido de excarcelación. De esta manera, los petroleros, que fueron encarcelados en la ciudad norteña de Las Heras, convierten a la ciudad en el sitio con mayor recurrencia de presos obreros del país.




Se debe recordar que en diciembre de 2013 fueron condenados a cadena perpetua cuatro trabajadores por el crimen del policía Jorge Sayago, producido durante la gran huelga de 2006 contra el impuesto al salario y la tercerización, asesinato que no fue aclarado, por el que no hubo pruebas y con testimonios arrancados mediante apremios ilegales y en centros clandestinos de detención, según denunció la entonces concejal del Frente para la Victoria Roxana Totiño. Los cinco detenidos de esta semana cumplían medidas en la empresa Bacssan, uno de cuyos delegados también fue puesto en prisión.

En Jujuy ocho miembros del sindicato municipal, incluso su secretario adjunto. Los presos, que mantenían medidas de fuerza y que fueron liberados bajo caución, son Julio Farfán (delegado de Recolección y Reciclaje), Eduardo Ruiz (delegado de Servicios Públicos), Ariel Gutiérrez (delegado de Defensa Civil), Blanca Lezcano (delegada de Tránsito), Pilar Ruiz (delegada del Cuerpo de Serenos), Roberto Urzagasti (delegado de Automotores), el trabajador Rogelio Bambuira y el secretario Adjunto del SEOM, Justo Pastor Leguizamón. Desde Jujuy, Carlos “El Perro” Santillán declaró a plazademayo.com:  

“Se ha abierto una etapa represiva que incluye la judicialización de cualquier tipo de reclamo reivindicativo. La intencionalidad es descargar todo el peso del ajusto sobre los laburantes”.

-¿Cuál es la situación de los detenidos una vez liberados?

-Han sido acusados por daños agravados, instigación al delito, amenazas agravadas, obstrucción de la vía pública y otros. Yo he recibido una citación para una declaratoria y creemos que es posible que culmine con mi detención. Los liberados deben presentarse ante el juzgado una vez al mes mientras dure el proceso, pero no sólo eso, sino que el juez determinó que no pueden participar de multitudes ni de manifestaciones, lo cual es completamente ilegal y reprime todo derecho sindical. Están violando toda normativa y todo derecho para que no protestemos en esta etapa de crisis económica.

Durante la jornada de hoy, jueves 27, se realizaron diversas manifestaciones para reclamar la absolución de los presos de Las Heras, con medidas anunciadas con antelación que incluían el corte de varias rutas y calles. Los cortes de la Panamericana y de Liniers fueron reprimidos por la Gendarmería a cargo del secretario de Seguridad Sergio Berni -en cuyo pasado se pueden constatar denuncias de infiltración en las huelgas de los mineros de Río Turbio-. En el Puente Pueyrredon la medida no pudo ser llevada a cabo por la presencia de gendarmes con doscientos perros que amenazaban a los manifestantes. La represión más salvaje se produjo en Liniers, donde -tal como sucedió en la Panamericana- se utilizaron palos, gases y balas de goma. Todavía se encuentran detenidos tres de los manifestantes Luis Sucher, delegado de los trabajadores del Hospital Posadas (ATE); Luis Giordano, miembro de la comisión interna de los trabajadores de Alicorp (ex Jabón Federal) y Antonio Barreda, trabajador del Hospital Posadas. 

La situación de Sucher reviste especial gravedad, ya que tiene desprendimiento de retina en uno de sus ojos que podría perder, a la vez que tiene tres dedos quebrados. Los otros detenidos fueron trasladados a la comisaría de Lugano, sita en la calle Madariaga. “Los acusan de robarle el celular a un comisario -señala la abogada Myriam Bregman, del Ceprodh-. Los molieron a palos, un delegado del Posadas puede perder un ojo. Creo que se trata de un recrudecimiento muy notorio de la represión a la protesta social. Berni querría eliminar el derecho a manifestarse. No tiene que ver sólo con la proximidad de las paritaris, sino que se trata de una política más general, el gobierno se prepara para reprimir frente a una crisis política muy grande. Quiere mostrarse como un gobierno que va a actuar con mano dura con todo aquel que ose a enfrentar el ajuste”.

Sergio Berni, el hombre proclamado por la presidenta Cristina Fernández para llevar adelante el trabajo represivo, declaró esta tarde en el programa “Cortando la tarde”, que emite A24, que denunciaría ante la justicia a los diputados nacionales del Frente de Izquierda Néstor Pitrola y Nicolás del Caño, y al diputado provincial del FIT, Christian “Chipi” Castillo, por asociación ilícita, debido a las protestas realizadas hoy por la mañana. Cuando los periodistas le preguntaron que si, de fructificar la denuncia, los diputados podrían perder sus bancas, Berni declaró: “Ojalá”.

El gobierno de la inflación, la devaluación y los acuerdos con los organismos financieros internacionales se prepara para enfrentar las reacciones ante la crisis con más represión. Los dsectores populares que se manifiesten podrán comprobar que si bien los Kirchner Descolgaron un cuadro, también ascendiaron a un Milani y a un Berni. Con los riesgos que ellos implica. "no vamos a reprimir la protesta social,no esperen eso de nosotros"
CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER

#LibertadALosPetrolerosDeLasHeras
Foto: "no vamos a reprimir la protesta social,no esperen eso de nosotros"
CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER

#LibertadALosPetrolerosDeLasHeras

- See more at: http://www.plazademayo.com/2014/02/protesta-social-los-k-aumentan-la-represion/#sthash.sv87nvyc.dpuf

Adónde va Venezuela

Venezuela ElectionPor  

Un artículo del escritor venezolano Modesto Emilio Guerrero, en Tiempo Argentino, el domingo pasado, sirve como punto de partida para analizar la actualidad de Venezuela. Para Guerrero, biógrafo de Hugo Chávez y chavista declarado, lo ocurrido a mediados de mes fue “una aventura insurreccional de la agrupación derechista Voluntad Popular”. Esta caracterización demuele el planteo de que el gobierno de Nicolás Maduro hubiera enfrentado en algún momento una amenaza de golpe real. Guerrero descalifica incluso la posibilidad de “aceleración de los tiempos políticos” en términos inequívocos: “Eso no está asegurado -dice-, según las actuales condiciones internacionales. Esta vez -refuerza Guerrero-, los grupos económicos y financieros más importantes del país se retrajeron. Fedecámaras, protagonista en 2002 y 2003, no acompañó en su aventura”.

Lo que Guerrero viene a decir, en un lenguaje un poco más “ortodoxo”, es que el imperialismo no quiere un golpe en Venezuela hasta donde alcanza la vista. Es curioso que no cite, en apoyo de su caracterización, el planteo del dirigente opositor Henrique Capriles, para quien la descomposición política y económica del proceso bolivariano todavía no ha alcanzado su punto de madurez y tampoco ha volcado a una masa significativa del chavismo hacia la oposición de derecha. Es probable, decimos nosotros, que este vuelco no ocurra nunca y que el verdadero temor de la derecha es que un golpe de Estado desate una crisis revolucionaria. Guerrero, de nuevo, cita a quien define como “el académico derechista más respetado”, quien escribió que “La agenda de López (el jefe derechista detenido) no se corresponde con asuntos de política nacional”.

Guerrero no abunda en ejemplos para ilustrar su tesis acerca de “las condiciones internacionales” inadecuadas para un golpe, pero salta a la vista que el chavismo se ha entrelazado fuertemente con importantes capitales petroleros en la explotación conjunta de la cuenca del Orinoco, los cuales no tienen interés en una desestabilización política. Venezuela, por otra parte, es garante decisivo de las negociaciones de paz entre el gobierno colombiano con las Farc, que cuentan con el apoyo por un lado, de Cuba, y por el otro, de Estados Unidos. La salida al conflicto colombiano ocupa un lugar estratégico en la agenda de Washington. Brasil, asimismo, es un protagonista fundamental en todo el asunto, con fuertes inversiones en infraestructura en Cuba y en Venezuela. Casualmente, en las vísperas de la ‘aventura insurreccional’, la UE (que sabe mucho de esto, como se ve en Ucrania) derogó un embargo comercial que venía aplicando contra Cuba.

Guerrero está seguro de que la mentada ‘aventura’ fue “derrotada”. No se entiende por qué habla en su texto de la necesidad de “blindar la democracia bolivariana y su gobierno constitucional”. Para Guerrero, al cabo de catorce años de chavismo, “se impone como inmediato (¡!) revolucionar el modelo rentista de control corporativo centralizado”, lo cual significa la admisión de que en Venezuela no gobiernan los trabajadores sino camarillas que se apropian de la renta petrolera del país. Este ‘corporativismo centralizado’ -prosigue Guerrero- convirtió en improductiva la producción, en frágil la moneda y ayudó a la oposición a colapsar la distribución. Y lo peor, alejó del gobierno a capas del chavismo”.
Guerrero describe un derrumbe político. Si esto es así, la ‘aventura’ no fue ‘derrotada’, sino que se ha constituido en una suerte de ensayo general. Las milicias y militancias de un sector de la derecha han pasado una prueba de confrontación directa con un gobierno gastado. “Revolucionar el modelo de renta petrolera” significa que los parches, las reformas y los ajustes no son salida, sino que la única vía para ello es un cambio de estrategia. Pero hablar de cambio de estrategia es hablar de un cambio en la conducción de clase del proceso histórico. En una columna adyacente del mismo diario, el kirchnerista Tiempo le da espacio a otra propuesta: “Fortalecer el centro y acordar con la oposición moderada de Capriles”. Juntando todas estas apreciaciones, emerge que el chavismo se encuentra en una situación histórica terminal.

En los últimos días, Maduro ha recogido, al menos de palabra, la propuesta del “acuerdo nacional”, lo que de todos modos es una indicación de línea política general. No existe la menor duda, sin embargo, de que es una vía sin salida para gran parte del chavismo y de sus cúpulas militares. Para volver al principio de esta nota, “en las actuales condiciones internacionales” se cocinan golpes y revoluciones, como ocurre en la mayor parte del mundo. Es la crisis mundial.

Si hay que agregar que Venezuela tiene deficit de cuenta corriente , deficit fiscal del porden del 15% del PBI , el Chavismo junto con la MUD vienen negociando el aumento de la gasolina y que el gobierno se vió obligado a frenar las importaciones por falta de divisas ( como hace Argentina pisando las importaciones pero mucho peor ) lo cual aumenta el desabatecimiento  que existe desde que un estado se pone a controlar precios , como existe hoy en Argentina donde hay un incipiente desabastecimiento pero que no afecta los alimentos ya que en esto Argentina se autobastece y no necesita divisas como Venezuela . El Chavismo comenzó el ajuste pero mas timidamente al igual que el kirchnerismo temeroso de la reaccion social , freno el aumento de la gasolina que ya habia consensuado con la MUD . El kirchnerismo ya se encuentra desatado al ajuste feroz llimitando claramente los incrementos salariales muy por debajo del inflacion apuntando a rebajas salariales de entre el 10 y el 15% dobre los trabajadores mientras acusa a los opositores por prentender bajar salarios mientras ajusta sobre los trabajadores



El Frente de Izquierda presenta un Proyecto de Ley sobre salario mínimo, aumento de emergencia y prohibición de despidos y suspensiones




Conferencia de Prensa en el Congreso 
 
Frente al ajuste en marcha sobre la clase obrera, que se traduce en una completa desvalorización de los salarios y despidos y suspensiones que comienzan a multiplicarse por todo el país, los diputados Néstor Pitrola, Pablo López y Nicolás del Caño, presentarán un Proyecto de Ley elaborado por la Mesa Nacional del FIT que incluye un Aumento de Emergencia de 3.000 pesos, un salario mínimo igual a la canasta familiar, hoy en 9.000 pesos, y para una mínima jubilatoria que deberá ser el 82% del salario mínimo contemplado en dicha ley. Además, plantea la prohibición de despidos y suspensiones, asegurando el reparto de las horas de trabajo sin afectar el salario.
 
El diputado salteño Pablo López declaró que “en medio de un proceso de ocupaciones de fábricas ante los despidos, de reclamos por la reapertura de las paritarias, que en el caso de los docentes el gobierno plantea cerrar mediante un decretazo, el Frente de Izquierda plantea un proyecto de ley para defender los puestos de trabajo, el salario y las jubilaciones”.
 
A su vez, Pitrola declaró: “En momentos en que el gobierno empeña los recursos del Estado para rescatar a la vaciadora Repsol, que dejó sin reservas de petróleo y gas a nuestro país, con un pasivo ambiental incalculable, a los docentes le aplica el ajuste negándoles un aumento que compense la inflación.”
 
Conferencia de prensa: jueves 27, a las 16hs en el Anexo A, sala 3 piso 2, del Congreso Nacional, los diputados del FIT, acompañados de delegaciones obreras, ofrecerán una Conferencia de Prensa para anunciar y explicar los fundamentos del Proyecto.
 
PARTIDO OBRERO
 
En el Frente de Izquierda

miércoles, 26 de febrero de 2014

La Iglesia es Pedófila

VATICAN-POPE-MASS-INAUGURATION


“La soledad de un niño persiste aun cuando llegan los demás”

El Comité de los Derechos del Niño, de la ONU, presentó, el 5 de febrero un informe donde denuncia a la Iglesia Católica de encubrir miles de casos de abusos de menores por parte del clero.

En el informe, se critica las posiciones de la Iglesia sobre homosexualidad, aborto y anticoncepción. Se expresa que el “código de silencio adoptado”, “sistemáticamente privilegió la preservación de la reputación de la Iglesia y el presunto ofensor, sobre la protección de los niños”. Hace hincapié en la práctica de transferir a los abusadores a otras parroquias, a la falta de cooperación de las autoridades civiles, que la pena máxima para un sacerdote acusado de abuso es ser expulsado del sacerdocio y no hay sentencias de prisión.

El informe también contiene una larga lista de recomendaciones no vinculantes sobre las que el Vaticano deberá informar en 2017, y plantea que deberían difundirse los archivos sobre los acusados y sus protectores.

El papa Bergoglio, alias Francisco dejó atrás su “vergüenza” por los crímenes cometidos contra la infancia y reaccionó con fastidio, expresando que no han tenido en cuenta las explicaciones que dieron. El Vaticano rechazó algunos puntos como injerencias en el ejercicio de la libertad religiosa (aborto, etc.)

Monseñor Tomasi, observador ante la ONU, en declaraciones reveladoras de la intención de continuar con estas prácticas de parte de la Iglesia, dijo que hay 40 millones de casos de abusos de niños en el mundo y que sólo una minoría es responsabilidad de la Iglesia. Que todo esto la dañaba y que la Santa Sede sólo es responsable del territorio de la Ciudad del Vaticano, donde viven 36 niños.
Mientras que el vaticanista Tornielli, reconociendo los crímenes expresó: “Lo que escribieron es verdad, pero son asuntos que pertenecen al pasado. Por años la fórmula fue trasladar al autor de los abusos, por lo que volvían a cometerlos. Las víctimas además …las alejaban también porque atacaban el honor de la Iglesia. Ese sistema no existe más, se hicieron progresos significativos”.

Pero la realidad de los hechos lo contradice: según la Congregación para la doctrina de la Fe, en 2011 y 2012, bajo Benedicto, unos 400 sacerdotes perdieron su condición de curas, la pena más grave del derecho canónico, por abuso de menores. Esta congregación funciona como una justicia interna. Hasta ahora ningún obispo fue sancionado por encubrimiento y recién en el 2010 el papa Benedicto ordenó denunciar ante la policía.
Pero las organizaciones se movilizaron en las puertas de la sede del Comité de la ONU cuando declaraban los curas y la propia policía lo impidió, protegiendo a los violadores y no a las víctimas.
Los casos que ejemplifican la continuidad del accionar de la Iglesia son contundentes: hay una carta del 2001, del cardenal colombiano Castrillón Hoyos que felicita al obispo francés Pican por no haber denunciado a un cura pedófilo. El movimiento Nosotros Somos Iglesia, denunció que el obispo Finn, de Kansas USA, aún sigue en su cargo, a pesar de que en 2011 fue acusado de no denunciar a un cura sospechoso de abuso. Los Legionarios de Cristo, desde 1941 roban y abusan de menores, incluidos sus propios hijos. Esta congregación mejicana contó con la protección del Vaticano y aún sigue existiendo.

Una violación o abuso sexual, en la infancia provoca, según los especialistas, un trauma equivalente al de los sufridos en una guerra, una catástrofe o accidente y deja secuelas como la depresión y la tendencia al suicidio.

La Iglesia es el bastión de los pedófilos, reprime la sexualidad y alienta la perversión en todos sus aspectos, como parte de la regimentación de las relaciones humanas dentro del régimen social de explotación.

La ONU archiva informes tras informes sin accionar sobre la apertura de los archivos y la condena a los culpables. Tarea que queda en manos de las organizaciones socialistas y de las mujeres que combaten contra este régimen social y su Iglesia.

Silvia Jayo

- See more at: http://prensa.po.org.ar/po1302/2014/02/20/la-iglesia-es-pedofila/#sthash.HWPxo46a.dpuf

El peronismo como límite sistémico

Desafío para la izquierda

Perfil

La debacle que afronta el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner exhibe la verdadera naturaleza política e ideológica del kirchnerismo. Ya no puede sostener su épico relato seudoizquierdista ni cobijarse bajo la laxa e insustancial categoría política de “progresista”.

Ha quedado palmariamente demostrado que el peronismo, aún en su versión kirchnerista, ha continuado cumpliendo su tradicional rol político que consiste en erigirse en el gran dique de contención de las masas dentro de los límites del sistema capitalista en Argentina.


Desde su surgimiento (1945), los distintos posicionamientos que ha enarbolado el peronismo se convirtieron en el mejor indicador para conocer cuál es el techo político tolerable por el sistema capitalista en cada momento histórico y todas las grandes transformaciones estructurales que necesitó realizar el capitalismo, en Argentina, se instrumentaron a través del peronismo.

La oscilación entre los más diversos modelos económicos adoptados por el peronismo en cada etapa histórica reflejan, simplemente, las cambiantes necesidades del sistema capitalista. Porque el modo de producción siguió siendo capitalista. Y todas las relaciones de producción siguieron siendo típicamente capitalistas.

El peronismo ha logrado disociar los intereses históricos de la clase trabajadora (una sociedad sin clases) de sus intereses inmediatos (reivindicativos) exhibiendo a estos últimos como el único horizonte posible para los trabajadores y, con ello, ha debilitado, sistemáticamente, la posibilidad que surja, en Argentina, una verdadera herramienta política de la clase trabajadora que pueda sintetizar ambos intereses para avanzar en una edificación revolucionaria.

Lejos de constituir una gradual transición al socialismo, el peronismo siempre ha sido el principal obstáculo político para que la clase trabajadora pudiese avanzar en alguna forma de construcción política transicional hacia una revolución socialista o, al menos, para que pudiese concebir algún modelo político anticapitalista.

Y cuando el movimiento de masas desbordó los límites políticos del peronismo, el último reaseguro del sistema capitalista fueron las dictaduras, especialmente la última (1976-1983).

La actual situación política argentina es un período de transición. La clase trabajadora y las masas ya no se sienten representadas por el peronismo, pero, todavía, carecen de otra representación política que las exprese. Las genuinas fuerzas políticas marxistas existentes en Argentina tienen por delante un renovado desafío.

Este período de transición no tiene, ni puede tener, plazos ni formas predeterminadas. Pero la edificación de herramientas políticas transicionales (con toda la flexibilidad táctica que resulte necesaria) se torna imprescindible para que la izquierda argentina pueda convertirse en la nueva representación política de una clase trabajadora que ha comenzado a recorrer el camino que implica, según la expresión de Marx, pasar de ser “clase obrera en sí” a ser “clase obrera para sí”.

Esta transformación en la conciencia política y social de la clase trabajadora es indispensable para transponer, con éxito y de manera duradera, los límites del sistema capitalista.

La necesidad de contar con un Partido marxista revolucionario, cuyo funcionamiento esté basado en el centralismo democrático, tal como fue concebido por Lenin, continúa siendo un prerrequisito insustituible para una construcción revolucionaria. Porque la tarea de vencer a un capitalismo más centralizado que nunca requiere instrumentos organizativos a la altura del perfeccionamiento alcanzado por el Estado capitalista.


El resurgimiento del pensamiento político marxista y la ostensible resistencia anticapitalista que se registra, en todo el planeta, exigen una rápida recomposición de las genuinas fuerzas marxistas existentes en nuestro país para que la izquierda argentina acuda, con éxito, a esta impostergable cita con la historia.
Mario Raúl Bordón. Abogado de la ciudad de Concordia (Entre Ríos).

Este artículo de opinión fue publicado en el diario "Perfil", que se edita en la ciudad de Buenos Aires, en su edición correspondiente al día sábado 22 de Febrero de 2014 (Página 40 - Cuerpo Principal - Sección "Ideas").

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.

Néstor Pitrola y Pablo López piden interpelación a Kicillof por el acuerdo con Repsol

Ante el anuncio de la firma del acuerdo con Repsol, los diputados del Frente de Izquierda, Néstor Pitrola y Pablo López, presentarán un proyecto de resolución que plantea la interpelación del ministro Axel Kicillof.

Pitrola declaró: “El acuerdo que aprobó el directorio de Repsol es un rescate de los vaciadores de YPF.
Kicillof compromete una emisión de deuda de casi 10 mil millones de dólares, cuya garantía es el ajuste general de la economía que incluye tarifas de combustibles en dólares y a precio internacional.”

“Quienes debían resarcir al país por fugar todas las ganancias de YPF, por dejarla endeudada, por no invertir, al punto de colocarnos en la presente quiebra gasífera y petrolera, reciben este premio colosal”.

“Este acuerdo leonino es el primer paso de un nuevo ciclo de endeudamiento que pagaremos con sudor y lágrimas: Club de París, fondos buitres, juicios ante el Ciadi”. “Pretenden que el Congreso discuta el tema bajo la extorsión del directorio de Repsol que dicta las condiciones, reclamamos urgente debate”, finalizó Pitrola.

“Los trabajadores argentinos vamos a indemnizar a un vaciador de recursos estratégicos como el gas y el petróleo.

Hay miles de millones para Repsol, en cambio golpean con un decretazo antisalarial a la paritaria docente.
Ajuste a los trabajadores, premio a los vaciadores”, concluyó el diputado por Salta, Pablo López.
 
PARTIDO OBRERO
 

martes, 25 de febrero de 2014

Relatos que se pagan caros o de como mentirle abiertamente en la jeta a los argentinos mientras devalúan el salario


Kicillof dice que Argentina no debe pagar un centavo a Repsol por la expropiación

El viceministro de economía argentino, Axel Kicillof. | Reuters

El ánimo de Cristina oscilaba entre dos polos; el del ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, partidario de buscar una salida pacífica al conflicto con los españoles y el de Axel Kicillof, quien ardía de impaciencia por desenfundar la pistola. Finalmente, el criterio –para algunos la falta de criterio- del impetuoso viceministro de Economía se impuso al de su tímido colega. Axel sacó la calculadora del bolsillo y le demostró a Cristina que restando los dividendos que Repsol había obtenido en Argentina, de lo que había pagado en 1999 por adquirir el 97,8% del capital accionario de YPF, la operación daba cero. Hasta un niño podía entenderlo: la empresa que dirige Antonio Brufau pagó 13.200 millones de dólares por su ingreso a la petrolera y a partir del año 2.000 giró 15.700 millones de dólares en dividendos. La aritmética del gurú económico fue el empujoncito que necesitaba Cristina para saltar a las quietas aguas (según Kicillof) de ese remanso.
En base a su razonamiento, el 'cerebro' a quien la presidenta designó como interventor de YPF junto con De Vido (siempre es sano mantener el equilibrio) no entiende por qué algunos kirchneristas y ciertos dirigentes de la oposición, se ponen a temblar cuando Antonio Brufau cifra en 10.500 millones de dólares lo que el Estado argentino debe a Repsol por sus acciones. "Recuerdo el caso de Aerolíneas Argentinas, cuando la gente de Marsans (España) dijo que valía 1.000 millones de dólares y el Tribunal de Tasación halló que no valía ni una fracción de esa cifra", dijo Axel en una reciente entrevista con la Televisión Pública, refiriéndose a la estatización de esa compañía aérea.
La calculadora de Kicillof no para de trabajar y mientras más lo hace, menores son las expectativas que Repsol puede tener en cuanto al resarcimiento de sus acciones.
Gracias a las pesquisas que ha venido realizando desde que asumió como interventor, Kicillof presume que YPF facturaba 14.000 millones de dólares por año y sólo declaraba una rentabilidad de 13.000 millones de dólares anuales. "Eso es lo que en todo el mundo se conoce como desviación de fondos y la cuestión es hacia donde se desviaba la plata", señaló Kicillof. Al ocultamiento de ganancias se suma la investigación que conducen los interventores por los supuestos daños ambientales que YPF habría ocasionado bajo la férula de Repsol y la deuda de 9.000 millones de dólares que habría contraído en circunstancias que no han sido dadas a conocer.
De acuerdo con el diario 'La Nación', dos días después de que Cristina Kirchner anunciara la expropiación (el 16 de abril) Kicillof insinuó a sus compañeros en el gabinete de ministros que Antonio Brufau no pretende realmente recibir la suma que pidió por las acciones de su compañía. "No me extraña que él diga que el 51% del paquete accionario vale 10.500 millones de dólares. Brufau está negociando. Igual podría haber dicho 30.000 millones de dólares", señaló.
Axel Kicillof no está en absoluto preocupado por lo puede deparar el futuro, tras la estatización de YPF. "A lo mejor Repsol va al CIADI (Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones) y allí le dicen: usted ha vaciado esa compañía (YPF). No lo sé; primero vamos a ver qué fija el Tribunal de Tasación", concluyó el funcionario de quien tanto se habla tanto en Argentina como en España.

http://www.elmundo.es/america/2012/04/23/argentina/1335193213.html

DEUDAS QUE PAGARÁN VOS , TUS HIJOS y TUS NIETOS
Oficial: Repsol aprobó el acuerdo por YPF
un pago de u$s 5.000 millones

Oficial: Repsol aprobó el acuerdo por YPF

El acuerdo de compensación por el 51% de las acciones, aprobado en Madrid por el Consejo de Administración de Repsol, prevé una indemnización de u$s 5.000 millones para lo cual Argentina emitirá nuevos bonos Bonar 24, Bonar X y Discount 33.



Represión burguesa, Marx y el “Estado libre”

 
El apoyo de amplios sectores de la izquierda latinoamericana a la represión que ha desatado el Gobierno chavista reactualiza el debate acerca de la actitud de los socialistas ante el Estado burgués y el aparato represivo. En la izquierda actualmente está muy establecida la idea de que es beneficioso para la clase trabajadora que exista un Estado “fuerte”, capaz de guiar a la economía hacia alguna forma de “socialismo de Estado bonapartista”, para usar la expresión de Lenin. Se piensa que el capitalismo “popular”, o guiado por el Estado, legitima y demanda un aparato represivo poderoso y consolidado. Por eso, y bajo el argumento de “combatir a la derecha”, se aplauden medidas represivas que van desde la restricción de libertades y derechos elementales, hasta las detenciones masivas, la tortura y el asesinato de manifestantes opositores. De ahí también el rol que tienden a jugar, en este tipo de regímenes, las fuerzas armadas y sus estructuras de mando.

Por supuesto, hay matices. Algunos están más curtidos en estas lides, otros andan “tragando sapos” (en Argentina, ley anti-terrorista, Milani, Proyecto X; en Venezuela, el menú no es para estómagos delicados). Para la militancia PC, por ejemplo, que supo aplaudir inmundicias como los campos stalinistas de exterminio, o los aplastamientos soviéticos sobre Berlín, Hungría o Checoslovaquia, lo que hacen hoy Al Assad en Siria, o Maduro en Venezuela, son apenas “detalles”. Otros, más prudentes, rechazan estos extremos. Pero todos están unidos por la convicción de que para avanzar hacia alguna forma de sociedad más justa, es necesario “poner rudamente en vereda” a los díscolos y rebeldes, así estos se cuenten por millones. Y para eso, nada mejor que un Estado poderoso.

A su vez, en la mayoría de la opinión pública está arraigada la idea de que la orientación estatal-represiva constituye la quintaesencia del “socialismo científico” de Marx y Engels. A ello han contribuido tanto la literatura teórica stalinista (pensemos en los tradicionales manuales que editaba la URSS), como el discurso de la derecha neoliberal, empeñado en atribuir a la obra de Marx y Engels la inspiración última del Muro de Berlín, de los campos de concentración de Corea del Norte o de la represión de cualquier régimen al estilo Al Assad o Chávez.

En contra de esta tradición tan instalada, se puede demostrar sin embargo que Marx y Engels fueron extremadamente críticos del estatismo y del Estado. El objetivo de esta entrada es resumir este aspecto del pensamiento de Marx y Engels. Adelantando el argumento, sostengo que Marx y Engels, partían de caracterizar al Estado como una fuerza enemiga de la clase obrera, y consideraban, por lo tanto, que los trabajadores debían tener una actitud hostil hacia el Estado, e independiente de la clase dominante. En este marco, aconsejaron defender las libertades democráticas, incluso en el seno de la democracia burguesa. Lo hicieron porque la conquista de esas libertades mejora las condiciones para la organización independiente de los explotados y oprimidos. Lo cual encaja en la idea rectora de la Primera Internacional de que “la liberación de los trabajadores será obra de los trabajadores mismos”. Por eso también Marx y Engels se opusieron a los que pensaban que se puede implantar el socialismo desde las cumbres de una minoría de iluminados, y defendieron las principales medidas transformadoras de la Comuna de París.

Fuerza pública para la esclavización social

Marx y Engels parten de considerar al Estado “la organización que se da la sociedad burguesa para sostener las condiciones generales externas del modo de producción capitalista contra los ataques de los trabajadores o de los capitalistas individuales. El Estado moderno, cualquiera sea su forma, es una máquina esencialmente capitalista, un Estado capitalista ideal” (Engels, 1968, p. 275). Este rasgo determinante del Estado se correspondía, en la visión de Engels, a toda forma de régimen (monarquía, república democrática), y no se alteraba cuando el Estado asumía el rol de empresario. En última instancia, las estatizaciones burguesas no abolían la explotación; apenas alteraban su forma (carta de Engels a Oppenheim, 24 de marzo de 1891;  una ampliación, aquí).

Marx compartía esta caracterización sobre el Estado. No sólo leyó y corrigió toda la parte económica del Anti-Dühring, sino también caracterizó al Estado como una fuerza pública de sujeción del trabajo. En La Guerra civil en Francia anota que, a medida que se desarrolló y profundizó el antagonismo de clase entre el capital y el trabajo, “el poder del Estado fue adquiriendo cada vez más el carácter de un poder nacional del capital sobre el trabajo, de fuerza pública organizada para la esclavización social, de máquina de despotismo de clase” (p. 60; énfasis agregado). Y describe al Estado moderno capitalista como “parásito, que se nutre a expensas de la sociedad y entorpece su libre desenvolvimiento” (p. 66).

Esta noción del Estado como fuerza para la opresión de clase, cualquiera fuera su forma, alejaba a Marx y Engels de la estrategia de los socialistas “estatistas” (por ejemplo, los seguidores de Lasalle), que buscaban la solución del llamado “problema social” en la acción estatal. La clase obrera debía luchar, en opinión de Marx y Engels, por establecer legalmente conquistas sociales -por ejemplo, la jornada laboral- sin por ello depositar confianza en las panaceas estatistas. En este respecto cobra relevancia la caracterización de Marx de la “república social” (demanda de las corrientes socialistas burguesas) como “la república que asegura la sumisión social” (La Guerra Civil en Francia). En el mismo sentido va su crítica al “apoyo del gobierno prusiano a las sociedades cooperativas”, que extendían el “sistema de la tutela”, corrompían a un sector de los obreros y castraban al movimiento (carta de Marx a Engels, 18 de febrero de 1865). Es en esta orientación que se inscribe la defensa de libertades democráticas en el sistema capitalista, y la crítica a la demanda de un “Estado libre”.

La crítica al “Estado libre”

La consigna del “Estado libre” fue incorporada al programa, votado en Gotha, del partido Socialdemócrata de Alemania, a instancias de los partidarios de Lasalle, quienes aspiraban a un Estado con plenos poderes, capaz de llevar adelante las reformas sociales. Pero esto implicaba elevarlo como aparato despótico y represivo. Como lo explicaba Engels: “El Estado popular libre se ha convertido en Estado libre. Según el sentido gramatical, el Estado libre es un Estado que es libre con relación a sus ciudadanos, por consiguiente, un Estado con un gobierno despótico” (carta a Bebel, 18 de mayo de 1875). A su vez, en la Crítica del Programa de Gotha, Marx escribía: “La misión del obrero… no es, en modo alguno, hacer libre al Estado. En el Imperio alemán, el ‘Estado’ es casi tan ‘libre’ como en Rusia. La libertad consiste en convertir al Estado de órgano que está por encima de la sociedad en un órgano completamente subordinado a ella, y las formas del Estado siguen siendo hoy más o menos libres en la medida en que limitan ‘la libertad del Estado’” (Marx, 1975, p. 24)

Pero esto significa que es tarea de los trabajadores procurar la reducción del poder represivo del Estado y la ampliación de las libertades. La idea directriz es que “el Estado no se necesita en interés de la libertad, sino para someter, como afirmó Lenin, años más tarde en El Estado y la revolución. Por supuesto, la reivindicación de libertades dentro del sistema capitalista se acompaña de la crítica al concepto de libertad de los economistas liberales clásicos, que consideraban a la sociedad como un mero agregado de átomos actuando “libremente” en procura de satisfacer sus propios intereses egoístas. La crítica de Marx al fetichismo de la mercancía y el capital, y al trabajo alienado, implica una crítica a una sociedad que niega el libre desarrollo de la mayoría de los individuos, y en la que las fuerzas productivas –y en primer lugar, las fuerzas del trabajo- están dominadas por la lógica de la ganancia. Pero esta crítica no debe confundirse con la política de hacer fuerte al Estado, esto es, a la fuerza pública organizada para la esclavización social.

Enfatizamos que en la visión de Marx, la lucha por las libertades no se limita a defender un sistema democrático burgués frente a un régimen monárquico, o bonapartista. Esto es elemental, pero se trata también de la ampliación de las libertades al interior de la democracia capitalista. Como observa Cesare Luporini, comentando el pasaje de la Crítica del programa de Gotha citado, aquí no se trata de la preferencia por la “república democrática” como terreno político en el cual se dan las mejores condiciones para el despliegue de la lucha del proletariado, sino “de una escala de valores que opera en lo inmediato, con relación al concepto de libertad” (p. 97). Por eso Marx no relega toda la libertad a una futura sociedad comunista (el reino de la libertad), ya que para él existe una zona que es política, en la cual “la libertad es el metro de medida de diversas formas de Estado existentes en el terreno burgués” (p. 98). Desde este punto de vista, “mientras más limitados estén (legalmente) los poderes (del Estado), más libre es la sociedad” (idem).

Liberación del trabajo y la Comuna

La lucha por la ampliación de libertades, y la consiguiente restricción del poder del Estado, se articula, en la obra de Marx y Engels, con el objetivo de ayudar a la liberación del trabajo, y el desarrollo de las potencialidades de los individuos. En la Ideología Alemana afirman que en la sociedad futura “el objetivo es la liberación de cada individuo”; esto es, una sociedad en la que cada uno participa “en tanto individuo”, a diferencia de una sociedad en la que los individuos “participan en tanto miembros de una clase”. En los Manuscritos de 1844 Marx había escrito, también en el mismo sentido, que “debe evitarse, sobre todo, el volver a plasmar la ‘sociedad’ como abstracción frente al individuo”. Estamos muy lejos de los regímenes burocráticos estatistas, o del capitalismo estatista burocrático.

El ideal de libertades plenas para los productores también se ve expresado en lo que Marx y Engels reivindicaron de la Comuna de París. En La lucha de clases en Francia se destaca que la Comuna estaba formada por consejeros municipales elegidos por sufragio universal, y que reunía las funciones legislativa y ejecutiva. Entre las medidas que subraya Marx están la supresión del ejército permanente y la policía, y su sustitución por el pueblo en armas; el establecimiento de la enseñanza gratuita, emancipada de la Iglesia y del Estado; la elección por sufragio universal de todos los cargos administrativos, judiciales y de enseñanza, y la retribución de todos los funcionarios al nivel del salario de los trabajadores; el haber tomado medidas de precaución contra sus propios diputados, declarándolos revocables en cualquier momento; y el haber intentado generalizar el sistema de comunas a todas las localidades y regiones de Francia. Recordemos que con respecto a la revocabilidad de los funcionarios, en la Crítica del programa de Gotha Marx anota que “la primera condición de toda libertad” es que “los funcionarios sean responsables en cuanto a sus actos de servicio respecto a todo ciudadano”; y con respecto a la educación, se pronuncia por “sustraer la escuela de toda influencia por parte del gobierno y la Iglesia”.

En cuanto a las medidas económicas, Marx elogia que la Comuna se orientara a la formación de sociedades cooperativas, que de forma coordinada regularían la producción según un plan. Aquí no se trata de un poder impuesto desde fuera o por arriba de los propios productores. No hay “directores burócratas” , porque es la población trabajadora la que se organiza y toma la economía en sus manos, a partir de lo existente, para emancipar al trabajo de la esclavitud asalariada.

Por otra parte, tampoco está presente aquí un partido que se arroga la representación de la clase obrera. Todas las corrientes políticas tienen derecho a expresarse y ser elegidas en la Comuna, a condición de que respeten su existencia. En esta línea Engels, en la “Introducción” citada, contrapone lo que hizo la Comuna con la tradición blanquista. Los blanquistas “partían de la idea de que un grupo relativamente pequeño de hombres decididos y bien organizados estaría en condiciones, no sólo de adueñarse en un momento del timón del Estado, sino que, desplegando una acción enérgica e incansable, sería capaz de sostenerse hasta lograr arrastrar a la revolución a las masas del pueblo y congregarlas en torno a un puñado de caudillos. Esto llevaba consigo, sobre todo, la más rígida y dictatorial centralización de todos los poderes en manos del nuevo Gobierno revolucionario” (p. 17). Pero no es lo que hicieron los comuneros, aunque en su mayoría eran seguidores de Blanqui. La Comuna pareció comprender que no se llega al socialismo sin la acción consciente y voluntaria del propio pueblo trabajador, organizado en gobierno. Es la verdad contenida en la famosa frase de Talleyrand, de que “las bayonetas sirven para cualquier cosa, menos para sentarse sobre ellas”.

Conciencia y autonomía de clase

Una de las ideas principales que se desprende de lo desarrollado hasta aquí es que todo lo que signifique fortalecer al aparato represivo, y restringir las libertades democráticas, termina siendo perjudicial para la emancipación del trabajo, y esto por dos razones. La primera es porque la acción y organización consciente de los asalariados sólo podrá desplegarse en la medida en que las políticas no sean impuestas “desde arriba”, a través de burócratas y funcionarios. Es una tontería pensar que fortalece la conciencia socialista el impedir información porque “es propaganda desestabilizadora de la derecha”, o que se potencia la organización anulando la expresión de corrientes políticas “que no nos gustan”. Alguna vez Trotsky lo explicó claramente, en crítica a dirigentes sindicales mexicanos que pedían la censura o el cierra de periódicos de la derecha. Decía el viejo revolucionario: “Sólo aquellos que son ciegos o de inteligencia simple pueden pensar que los obreros y campesinos pueden ser liberados de las ideas reaccionarios mediante la prohibición de la prensa reaccionaria. De hecho, sólo la mayor libertad de expresión puede crear las condiciones favorables para el avance del movimiento revolucionario en la clase obrera”. Los socialistas estatistas, en cambio, sólo conciben la lucha ideológica de la misma manera en que quieren arreglar todo: como burócratas, esto es, con resoluciones y ucases.

La segunda razón para oponerse al fortalecimiento del aparato represivo es que “cualquier restricción a la democracia en la sociedad burguesa es dirigida eventualmente contra el proletariado. (…). Hoy el gobierno puede parecer bien dispuesto para con las organizaciones obreras. Mañana puede caer, e inevitablemente caerá, en las manos de los elementos más reaccionarios de la burguesía. (…) La manera más eficiente de combatir la prensa burguesa es que la prensa de los obreros se desarrolle”. En otros términos, pedirle al Estado burgués (al que se hace aparecer como “neutro”) que fortalezca la posición de los explotados reprimiendo algunas manifestaciones ideológicas de la derecha, es sencillamente suicida para los explotados. Es otra variante de la idea de hacer al Estado cada vez más “libre” con respecto a la sociedad. No hay manera de compatibilizar esta intención con la advertencia de Marx de que no es el Estado el que debe colocarse por encima del pueblo, sino el pueblo el que tiene que dar al Estado “una educación muy severa” (Crítica del programa de Gotha).

El combate por las libertades, a su vez, apunta a fortalecer el accionar autónomo de los trabajadores. En palabras de Engels: “El partido de los trabajadores nunca debe atarse a ningún partido burgués, debe ser independiente y tener su propio objetivo y política. Las libertades políticas, el derecho de asociación y la libertad de prensa, ésas son nuestras armas (Engels, 1871; énfasis agregado). Esas demandas comprendían, en esencia, las de la democracia radical burguesa revolucionaria (como puede verse en el programa de 1880 del Partido Obrero de Francia, en cuya redacción colaboró Marx). Al generarse mejores condiciones para la politización y organización, se debilitan las posibilidades de manipulación, tutelaje o división de las fuerzas del trabajo por las corrientes burguesas o burocráticas. Puede pensarse, por caso, en el efecto que tendría conseguir en un país como Argentina la libertad en el seno de los sindicatos.

Conclusión, dos enfoques opuestos

Las diferencias entre el planteo de la izquierda estatista (o nacional estatista) y el que asociamos al enfoque de Marx (también de Engels) no son puntuales, ni se refieren a aspectos particulares. La posición teórica y crítica de Marx con respecto al sistema capitalista y el Estado capitalista, su crítica de la alienación, su ideal de liberación de los seres humanos, no encajan en los “socialismos” burocráticos y represivos que tanta admiración despiertan en amplias franjas de la izquierda.

Textos citados:
Engels, F. (1871): “Apropos of Working-Class Political Action”, Reporter’s record of the speech made at the London Conference of the International Working Men’s Association, September 21, en https://www.marxists.org/archive/marx/works/1871/09/21.htm.
Engels, F. (1968): Anti-Dühring, México, Grijalbo.
Luporini, C. (1980): “Lo político y lo estatal: ¿una o dos críticas?” en Balibar, Luporini y Tosel, Marx y su crítica de la política, México, Nuestro Tiempo.
Marx, K., y F. Engels, (1973): Correspondencia, Buenos Aires, Cartado.
Marx, K. (1975): La crítica del programa de Gotha, Marx y Engels, Obras Escogidas, t. 2, Akal, Madrid, pp. 5-30.
Marx, K. (1977): La guerra civil en Francia, Moscú, Progreso.
Trotsky, L. (1938): “Freedom of the Press and the Working Class” en http://www.marxists.org/archive/trotsky/1938/08/press.htm.

Descargar el documento:
[varios formatos siguiendo el link, opción Archivo/Descargar Como]
Represión burguesa, Marx y el “Estado libre”

Fuente : http://rolandoastarita.wordpress.com/2014/02/23/represion-burguesa-marx-y-el-estado-libre/

Coordinadora Sindical Clasista - Partido Obrero

Coordinadora Sindical Clasista - Partido Obrero

Politica Obrera