Declaración del Partido Obrero:
Desde hace varios años, Venezuela y el proyecto chavista han entrado en
un acentuado proceso de descomposición. A todos los fines prácticos
impera en Venezuela un estado de excepción, para hacer frente a una
escasez e inflación extraordinarias y a una deuda internacional
impresionante. Un sector importante de la burguesía está lucrando como
nunca en un mercado negro que no cesa de crecer. La mayor parte de las
gobernaciones y aún el gabinete han pasado a manos de funcionarios de
las fuerzas armadas. El movimiento bolivariano, que en 2002 quebró la
tentativa de privatizar la explotación del petróleo, ha quedado reducido
a un antiimperialismo puramente retórico. Como contrapartida, ha ido a
fondo en la estatización del movimiento obrero y en la abolición, en los
hechos, de la libertad de negociación colectiva.
Los asesinatos de
activistas clasistas continúan impunes y sigue la represión estatal a
los movimientos de lucha independientes.
La tentativa de la
oposición de derecha de explotar esta crisis extraordinaria en su
beneficio fracasó en las elecciones nacionales y municipales últimas.
Este fracaso acentuó una división preexistente e impulsó la acción
extralegal del ala que impulsa en forma expresa una salida golpista. Los
acercamientos del ala componedora, liderada por el ex candidato
presidencial, Capriles, convocada por el gobierno sobre temas como las
crisis municipales y la seguridad, no condujeron a nada. La expectativa
de la llamada “ultraderecha” es crear un impasse político excepcional
que provoque, alternativamente, el establecimiento de un régimen de
estado de sitio, un golpe militar del propio chavismo o una intervención
diplomática internacional – al estilo de lo que ocurre en Ucrania.
Una victoria de la provocación derechista – que admite diversas
alternativas al improbable derrocamiento del gobierno-, sería un
retroceso para los trabajadores de Venezuela y del conjunto de América
Latina. La responsabilidad principal por esta amenaza, sin embargo, le
cabe al propio gobierno de la camarilla cívico-militar que se reviste
con banderas bolivarianas. Ante estas circunstancias, que hemos
anticipado en forma reiterada, llamamos a repudiar las provocaciones
golpistas y a movilizarse por la derrota de ellas, sin brindar el menor
apoyo al gobierno existente y denunciando su impotencia y su alianza con
los capitales petroleros a los que se fue asociando en la última
década. Llamamos a la clase obrera a una deliberación política propia y a
valerse de los métodos propios de la clase obrera: asambleas, planes de
lucha, huelgas, ocupaciones de empresa, piquetes, contra el golpismo y
con un programa de reivindicaciones de los trabajadores.
sábado, 15 de febrero de 2014
Venezuela CONTRA LAS PROVOCACIONES GOLPISTAS Y CONTRA EL ESTADO DE EXCEPCIÓN
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2 comentarios:
Pensar que durante años te discuti el chavismo y a vos se te caía la baba por toda esa farsa populista con Chavez a la cabeza..que se cargaba a luchadores troskistas con sicariato propio.
Espero que ahora estés convencido
el asunto del pseudo socialismo venezolano (¿?) en el interior del capitalismo , es y será una farsa.
porque , a lo trotsky, sin dictadura del proletariado nadie puede hablar de socialismo en ése país.
dada la característica de la mecánica de esta mascarada orientada a robarle el cerebro a la población, ni el ascenso de la derecha ni la profundización del modelo chavista puede ser considerada una respuesta.
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